Cubierta de 'La torre elevada. Al Qaeda y los orígenes del 11S', de Lawrence Wright. / Archivo
historia

11-S, granero de verdad y ficción

Libros, películas y documentales han plasmado las hipótesis más variopintas en estos diez años

MADRID Actualizado: Guardar
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Fábulas, aventuras, conspiraciones, estudios rigurosos, esperanza, dolor, amor. El 11 de septiembre de 2001 no solo cambio las relaciones internacionales del planeta, sino que dio paso a un torrente de obras que diez años después vuelven a estar de actualidad. El filósofo y activista Noam Chomsky publicó '11-9-01' en noviembre de 2001, solo dos meses después de los atentados. Un libro que analizaba el papel de Estados Unidos, su política internacional y los porqués del atentado. Ahora, Chomsky reedita su libro con un prólogo en el que analiza la relación de Estados Unidos con el resto del mundo.

Los autores europeos fueron los primeros en novelar sobre los atentados. Fréderic Beigbeder colocó la acción de 'Windows on the world' en el restaurante de la Torre Norte. El alemán Art Spielgman, creador de la novela gráfica 'Maus', articuló 'Sin la sombra de las torres', donde ahondaba en los problemas estadounidenses. Los americanos, por su parte, buscaron en los negocios de la familia del líder de Al Qaeda, como hicieron Steve Coll ('Los Bin Laden: una familia árabe en un mundo sin fronteras', editado por RBA) o en las causas de la matanza. Lawrence Wright recorrió el nacimiento de la organización terrorista en 'La torre elevada. Al Qaeda y los orígenes del 11S' (Debate). Una década después aparecen en las librerías americanas los homenajes, como '11 de septiembre: el mundo habla', que incluye más de 200.000 mensajes de personaros que visitaron la zona cero; o 'The Legacy Letters: Messages of Lipe and Hope from 9/11 Family Members', que recopila los homenajes de cien personas que perdieron a sus seres queridos.

Conspiraciones

Los documentales han buscado durante estos años contar desde todos los ángulos posibles la tragedia que sacudió al mundo hace diez años y las más inverosímiles probabilidades. Entre las opciones más serias, se encuentran los trabajos realizados por los canales temáticos. Por ejemplo, el canal Historia produjo '102 minutos que cambiaron Estados Unidos', un puzle formado por las grabaciones que los propios neoyorquinos hicieron desde que se estrelló el primer avión hasta la caída de la segunda. Logró cuatro Emmys, incluido el premio al mejor largometraje de no ficción. No obstante, el documental más famoso sobre el 11-S es 'Fahrenheit 9/11', donde Michael Moore cuestiona con mordacidad la actuación de George Bush durante la crisis del 11 de septiembre y la permisividad del gobierno americano con los ciudadanos y bienes saudíes. La mayoría de los 19 terroristas que participaron en el secuestro de los cuatro aviones eran de Arabia Saudí.

Moore logró la Palma de Oro en el Festival de Cannes de 2004, en plena polémica por la invasión de Irak. En el aspecto más humano, destaca 'El hombre del aire', un documental realizado a partir de una fotografía sacada por Richard Drew. En ella se aprecia a un hombre cayendo desde una de las torres a las 9:41 horas. La foto provocó la indignación de muchos espectadores y lectores y los medios americanos la retiraron. Pero el Channel 4 británico tiró del hilo para encontrar a la persona que había optado por el suicidio. La hipótesis en el 'El hombre del aire' es que se trataba de un técnico que trabaja en un restaurante en la azotea de la Torre Norte. Ahora, en el décimo aniversario, los grandes canales de documentales harán especiales sobre el aniversario.

Los documentalistas fueron más rápidos en mostrar este hecho histórico que Hollywood. Solo hubo un intento de mostrar la tragedia en '11'09"01', un conjunto de cortos dirigidos por realizadores de todo el mundo como Ken Loach, Alejandro González Iñárritu, Sean Penn, Mira Nair , Idrissa Uedraogo, Amos Gitaï o Samira Majmalbaf . Los grandes estudios no se atrevieron a llevar a la gran pantalla este suceso hasta 2006, cuando dos cintas mostraron la cruda realidad de las víctimas. Paul Greengrass ('El mito de Bourne', 'Domingo sangriento') se encargó de escribir y dirigir 'United 93', que recrea cómo los 33 pasajeros y los siete miembros de la tripulación se amotinaron y lograron desbaratar los planes de los cuatro terroristas estrellando el avión en Pensilvania. La película se rodó con el beneplácito de las familias. Por otra parte, Oliver Stone recreó el drama de los bomberos neoyorquinos y de sus familias en 'World Trade Center' con Nicolas Cage y Michael Peña como protagonistas.

Pero el atentado más grave de la historia de la humanidad ha dado pábulo a todo tipo de conspiraciones, algunas imposibles de creer y otras más racionales, que han calado en un porcentaje importante de la población estadounidense. En 2006, una encuesta de Scripps Howard arrojó que el 36% de la población no se creía que los terroristas mandados por Osama bin Laden fueran los responsables del suceso. Un ejemplo de estos documentales que buscan otros responsables es 'Loose Change'. Dirigido por el amateur Dylan Avery y montado en casa, ha logrado más de 125 millones de visitas en la sección de vídeos de Google y ha sido visto por 30 millones de usuarios en YouTube.

La cinta incluye nuevos montajes y entrevistas que abarcan todas las leyendas urbanas acerca del 11 de septiembre. A saber: las Torres Gemelas no habrían colapsado sólo por el impacto de los aviones; el sorprendente colapso de la torre 7 del World Trade Center, que no fue impactada por ningún avión, tiene todas las marcas de una demolición profesional; un misil estadounidense, y no el vuelo 77 de American Airlines, impactó en el Pentágono. En la misma línea se mueve 'Confrontando la evidencia', que pone en entredicho toda la versión oficial. El francés Thierry Meyssan fue más allá en el libro 'La gran impostura'. Afirma, sin ningún tipo de dudas, que la masacre del 11 de septiembre fue financiada y fomentada en Estados Unidos y que el país se convertirá en un régimen militar. La obra se ha sido traducida a 27 lenguas y ha logrado vender más de 200.000 ejemplares en Francia.