China busca impedir una escalada entre Estados Unidos y su aliado en la Península de Corea
China busca impedir una escalada entre Estados Unidos y su aliado en la Península de Corea - REUTERS

China media para rebajar la tensión entre EE.UU. y Corea del Norte

Xi Jinping insta por teléfono a Trump a una solución pacífica a la escalada militar

Corresponsal en Pekín Actualizado: Guardar
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China está intentando rebajar la tensión en la Península Coreana, hacia cuyas aguas se dirige un portaaviones de Estados Unidos para impedirle al régimen del joven dictador Kim Jong-un que lleve a cabo más pruebas nucleares y de misiles. Ante esta nueva escalada militar, el presidente chino, Xi Jinping, habló ayer por teléfono con su homólogo estadounidense, Donald Trump, para advertirle de que quiere una solución pacífica a la crisis.

«Xi Jinping ha recalcado que China insiste en la desnuclearización de la Península Coreana para salvaguardar firmemente la paz y la estabilidad, apelando a medios pacíficos para resolver los problemas», informó la televisión estatal CCTV sobre esta conversación telefónica entre ambos mandatarios. La llamada fue iniciada por el nuevo inquilino de la Casa Blanca, según explicó en su comparecencia diaria ante la Prensa el portavoz de Exteriores chino, Lu Kang, quien instó a EE.UU.

y Corea del Norte a «no cometer acciones irresponsables», porque «en las actuales circunstancias eso es muy peligroso».

Apenas una semana después de que ambos celebraran su primer encuentro personal en la mansión de Trump en Florida, Xi Jinping ha visto necesario hacer este nuevo llamamiento a la calma, y luego publicitarlo en sus medios oficiales, por el repunte de la tensión militar.

Mensajes cruzados

Tras ordenar, precisamente durante dicha reunión con Xi, el bombardeo de una base aérea siria, el nuevo presidente de EE.UU. ha endurecido sus mensajes contra Pyongyang y, de paso, contra Pekín. «Corea del Norte se está buscando problemas. Si China decide ayudar, sería estupendo. Si no, ¡resolveremos el problema sin ellos!», escribió Trump el pasado martes en su cuenta de Twitter. En dicha red social, que se ha convertido en su altavoz favorito, también colgó otro mensaje vinculando las relaciones entre Washington y Pekín con el conflicto norcoreano: «Le he explicado al presidente de China que un acuerdo comercial con EE.UU. será mucho mejor para ellos si resuelven el problema de Corea del Norte».

Ante la celebración este sábado del 105 aniversario del nacimiento de Kim Il-sung, «padre de la patria» y abuelo del actual dictador, la Casa Blanca teme que el régimen estalinista de Pyongyang lleve a cabo una nueva prueba atómica o dispare su séptimo misil del año. Para impedírselo, Trump ha ordenado a una escuadra de ataque, capitaneada por el portaaviones nuclear «Carl Vinson» y apoyada por destructores con baterías antimisiles, que ponga rumbo al Mar de Japón, cerca de aguas coreanas.

Maniobras conjuntas

A tenor de la agencia Reuters, allí se le unirán buques de guerra nipones para llevar a cabo unas maniobras militares conjuntas a modo de demostración de fuerza ante Corea del Norte. Aunque no parece probable que Kim Jong-un enturbie con un desafío directo a EE.UU. la efeméride de su abuelo, que es la fecha más importante del calendario norcoreano y se conoce como el Día del Sol, sí podría lucir músculo militar con un gran desfile en Pyongyang este sábado o el día 25, cuando se conmemora la fundación del Ejército.

Como cada primavera, cuando tienen lugar las maniobras conjuntas entre Corea del Sur y EE.UU. que el Norte considera un simulacro de invasión, las espadas vuelven a estar alto. Una vez más, los expertos dudan de que la sangre llegue finalmente al río, pero el inesperado ataque del presidente Trump a la base aérea siria hace más creíbles sus serias advertencias a Kim Jong-un.

Mayor riesgo de guerra desde 2006

No hay duda de que el régimen chino, único aliado que le queda a Corea del Norte, está alarmado por la llegada a la región del portaaviones estadounidense «Carl Vinson» y su flotilla de ataque.

Además del llamamiento a la calma del presidente Xi Jinping, el periódico «Global Times», altavoz del Partido Comunista, alertó ayer sobre la gravedad de esta nueva crisis. «La última amenaza de Washington a Pyongyang es más creíble dado que acaba de lanzar un ataque con misiles sobre una base aérea en Siria. La Península de Corea nunca ha estado más cerca de un choque militar desde que el Norte efectuó su primer ensayo nuclear en 2006», advirtió en su edición en inglés el rotativo, publicado por el «Diario del Pueblo». «Pyongyang puede seguir con su dura postura pero, por su propia seguridad, debería al menos parar sus provocadoras actividades nucleares y con misiles», advirtió el editorial del «Global Times», que recomendó a Kim Jong-un «evitar cometer errores esta vez».

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