El II Plan de Lectura busca mejorar un 10% su hábito con una apuesta por lo digital

El II Plan de Lectura de Castilla y León 2016-2020 dotado con 76 millones de euros apuesta por lo digital, entre otras líneas de actuación centradas en las bibliotecas públicas, los bibliobuses rurales y la vinculación con los planes del español y de industrias culturales con el objetivo de mejorar en un 10% los indicadores de hábitos de lectura. El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, clausuró ayer en Burgos la presentación de este segundo plan como «compromiso público, institucional y personal» con algo que considera «fundamental» para el desarrollo social y profesional de las personas.

Herrera destacó que en la sociedad del conocimiento la lectura sigue siendo un «instrumento fundamental y trascendental» en cuyo fomento no debe olvidarse el papel creciente de las nuevas tecnologías.

El presidente de la Junta señaló que, fundamentalmente los jóvenes, acceden a la lectura a través de elementos multimedia lo que «implica un descenso de ventas del libro tradicional» y, también, la necesidad de estar a la altura de las nuevas circunstancias.

En este sentido, abogó por un «cambio normativo» para proteger los derechos de los autores ya que la extensión de lo digital produce consecuencias en la propiedad intelectual con el incremento de la piratería, entre otras cosas.

Reforzar la formación

Además, el presidente de la Junta afirmó que las grandes bibliotecas necesitan «reforzar su formación» para que sean «intensivas en el uso tecnológico». Por eso, el II Plan de Lectura de Castilla y León contempla reforzar formación en técnicas digitales de los 300 profesionales de las bibliotecas de la región. En el contexto de la expansión de la sociedad de la información y el conocimiento, las bibliotecas son un pilar básico, dado que facilitan el acceso a un gran patrimonio informativo en el que cada vez tiene más peso el soporte digital. Por ello, el II Plan de Lectura pretende que las bibliotecas ofrezcan una información más rápida y diversa, se involucren en iniciativas y proyectos vinculados a las tecnologías de la información y la comunicación. De este modo, se pretende, además, fortalecer un sistema consolidado de préstamo de libros electrónicos y de servicios en línea, lo que permite que la biblioteca llegue a cada rincón del territorio de Castilla y León.

Colección digital

También se fomentará la creación de contenidos digitales que se puedan utilizar como elementos de apoyo para el aprendizaje del español. La lengua se considera uno de los componentes esenciales de la identidad de Castilla y León y, por ello, la Biblioteca Digital de Castilla y León y todo el sistema autonómico de bibliotecas se ponen al servicio de su conocimiento.

En este sentido, además de promover la lectura digital para atraer a nuevos usuarios jóvenes y de llegar a cualquier punto del medio rural, el II Plan de Lectura contempla un sistema consolidado de préstamo de libros electrónicos y de servicios en línea, con la previsión de aumentar la colección digital de las bibliotecas públicas en un 80 por ciento, así como potenciar los programas de formación relacionados con nuevos soportes y formas de lectura. En estos momentos, el Sistema Público de Bibliotecas de Castilla y León es el más desarrollado de España, puesto que la red de centros cuenta con el mayor número de usuarios activos de todas las comunidades, casi 120.000 frente a los 60.000 de la siguiente, así como de fondos documentales, más de 2.150.000 unidades, y de operaciones de préstamo, casi 1.900.000, doblando prácticamente a la siguiente comunidad. Para sostener estas cifras, Castilla y León también es la Comunidad con más personal en las bibliotecas que gestiona, con unos 300 profesionales, y la que más presupuesto destina.

Estos proyectos se enmarcan en las ocho líneas de actuación del II Plan de Lectura de la Junta que Herrera desgranó en los actos de presentación celebrados en la biblioteca pública de Burgos con mesas redondas y talleres que supusieron, además, un ejemplo del papel «activo» que las bibliotecas representan en la actualidad.

La presentación incluyó una mesa redonda sobre el fomento de la lectura en el siglo XXI y en la que han participado profesionales del mundo del libro, la lectura y la educación y una conferencia del escritor Luis Mateo Díez sobre la relevancia de la lectura en la sociedad civil. Paralelamente se realizaron una serie de actividades de fomento de la lectura dirigidas a niños y jóvenes con varios talleres como el «Club de cultura silenciosa» o «Las palabras de Cervantes».