El Consejo Escolar pide a Educación que vuelva a apostar por las cocinas en los centros

La vuelta de las cocinas a los centros con empleados públicos que se encarguen de su funcionamiento es una de las peticiones que próximamente trasladará el Consejo Escolar de Castilla y León a la Junta. Éste órgano consultivo sugerirá también que se termine con la denominada línea fría en los comedores escolares de la región para «lograr la calidad alimentaria y la satisfacción de las familias».

El Consejo ha aprobado recientemente un informe sobre la situación del curso 2015-2016 en el que se incluye, además de esa solicitud, una lista más amplia de sugerencias que no obligan al departamento dirigido por Fernando Rey, pero sí muestran el sentir de sus miembros-administración, padres, profesores y los propios alumnos-. En ese documento la comunidad educativa hace una radiografía del curso, pero aprovecha también para añadir sugerencias.

La propuesta sobre los comedores escolares, incluida por CSI-F como enmienda, fue debatida y aprobada por mayoría, aunque no por unanimidad, explicó ayer el presidente del Consejo, Marino Arranz. No es la primera vez que este tema llega al debate. Y es que el asunto surgió a raíz de algunos problemas registrados en comedores de la región que utilizan el sistema de línea fría. El año pasado fue la primera vez que salió adelante una recomendación similar, recordó Arranz. Los idiomas están también entre las principales peticiones que se trasladarán a la Junta. Por un lado, se solicitará una evaluación más exhaustiva del modelo bilingüe en la Comunidad y, por otro, que las Escuelas Oficiales de Idiomas acerquen su servicio al medio rural a través de las denominadas secciones con el objetivo de responder a una demanda creciente.

Bilingüismo

Como propuesta también de CSI-F, el Consejo Escolar pedirá que se analicen algunos aspectos más sobre el bilingüismo de los que la Consejería de Educación ya está revisando. Así, plantean que se mida «la posibilidad de segregación en el alumnado», si existe desventaja para los estudiantes con peores competencias lingüísticas o si afecta a los derechos laborales de los docentes. La extensión del modelo de Bachillerato de Investigación y Excelencia al medio rural y a centros «con un porcentaje significativo de alumnado en situación social y económica más desfavorable» será una cuestión que también algunas se trasladarán a la Consejería junto a la preocupación de contar con un equipamiento informático adecuado en los centros escolares.