La gran victoria del PP de Cospedal reactiva su candidatura a la Junta

La inesperada victoria del PP en las eleccciones generales del pasado domingo ha generado un efecto contundente en este partido en Castilla-La Mancha, en horas bajas tras la llegada hace un año a la Presidencia de la Junta de Comunidades del socialista Emiliano García-Page, con el apoyo parlamentario de Podemos. Un «extraordinario resultado» del PP en la región, donde María Dolores de Cospedal (cabeza de lista por Toledo al Congreso) ha insuflado una auténtica sobredosis de optimismo a las bases y el futuro se ve con ojos muy distintos, con fuerzas renovadas en la pelea por recuperar el Gobierno regional dentro de tres años, con Cospedal como candidata tras su breve estancia en el sillón del Palacio de Fuensalida.

Serio, pero exultante por dentro, se pudo ver ayer a su número dos en la región, el secretario general del PP, Vicente Tirado, en la rueda de prensa celebrada en las Cortes donde dio cuenta de los resultados de su partido tras una noche electoral en el que ni ellos mismos creían que habían ganado en todas las capitales, en los grandes municipios y en las cinco provincias de Castilla-La Mancha, con una enorme diferencia sobre el PSOE.

Así las cosas, -con 12 escaños (dos más que en diciembre), frente a los 7 del PSOE y 2 de Podemos (Ciudadanos desaparece)-, Tirado subrayó que la «clara» victoria del PP servirá «para seguir trabajando al servicio de los intereses de los castellano-manchegos y para apoyar los grandes objetivos que tenemos». Quiso dejar muy claro que Cospedal «es la verdadera artífice» de la victoria del PP en la región, una Comunidad autónoma «que se ha pateado y donde hemos logrado el tercer mejor resultado de toda España».

Destacó que el PP ha conseguido dos diputados más que en las elecciones generales del pasado diciembre, y ha logrado todos los senadores que podía tener. Con especial énfasis se refirió a que se haya mantenido el tercer diputado por Ciudad Real, algo que «era muy complicado».

Además, el secretario general del PP de Castilla-La Mancha señaló que el presidente autonómico, Emiliano García-Page, «es el gran perdedor en la región, el que ha cosechado el peor resultado gobernando, lo que pone de manifiesto el fracaso de sus políticas; ha perdido 29.342 votos en solo seis meses y 92.290 votos desde las pasadas elecciones autonómicas», mientras que el PP ha subido en 64.232 sufragios desde las elecciones autonómicas de mayo de 2015, obteniendo un 43% de los votos en Castilla-La Mancha.

Entre otros logros, como la victoria en todas las capitales de provincia y en los grandes municipios de la región, Tirado destacó que el PP es el único partido que ha conseguido subir el número de votos en Puertollano y ha ganado en localidades tan importantes como Villarrobledo, Talavera de la Reina, Hellín, Tomelloso, Valdepeñas, Azuqueca de Henares o Illescas, así como en 20 de los 22 municipios pertenecientes a la Asociación de Municipios Ribereños de los Embalses de Entrepeñas y Buendía. Además, el PP ha obtenido en Castilla-La Mancha 10 puntos más que la media del partido y 15 puntos más en la región que el PSOE de Page, a quien culpó del «desgaste» del PSOE regional por «sus incumplimientos y mentiras».

Frente a ello, «el PP ha demostrado ser un partido fuerte, sólido y unido en torno a Cospedal, con ilusión y trabajando con mucho rigor». En este punto, vaticinó que en tres años «habrá en Castilla-La Mancha un Gobierno del PP tras las elecciones autonómicas de 2019, y con María Dolores de Cospedal a la cabeza, por supuesto, porque es una buena gestora, es eficaz, pero tiene una virtud fundamental, y es que es muy trabajadora».

A su juicio, Cospedal es «una de las grandes vencedoras y puede presentar este resultado a nivel nacional como aval de su gestión, ya que con un 43% de los sufragios, que es un resultado muy difícil de obtener, demuestra que está trabajando mucho y bien como presidenta del PP en la región».