Sociedad

El solitario y carísimo viajero del Aeropuerto de Huesca

Construirlo costó 40 millones de euros y solo tuvo un pasajero en enero. Todo un «éxito»: en enero de 2017 no tuvo ninguno

Vista de la terminal del aeropuerto oscense, totalmente vacía Fabián Simón

R. P.

Una escuela de pilotos y otra de drones tratan de lavar la cara a la ruina acumulada en el Aeropuerto de Huesca , un complejo aeroportuario en el que se dilapidaron decenas de millones de euros de dinero público y que en enero tuvo un solitario pasajero . Tras años sin actividad alguna, esas escuelas han logrado que, por lo menos, el aeropuerto tenga uso práctico a lo largo del año. Pero de ahí a rentabilizarlo hay un trecho enorme.

Las estadísticas de pasajeros son elocuentes. Pese a las prácticas de vuelo, el aeródromo oscense solo contabilizó 257 pasajeros en 2017. Y, pese a lo raquítico del balance, fue todo un logro, porque en 2016 tan solo se anotó 95 pasajeros.

El fiasco es tan tremendo que un único pasajero puede hacer que la estadística se dispare. Ha ocurrido en el primer mes de este año. Según los datos oficiales que ha hecho públicos Aena, el Aeropuerto de Huesca tuvo un único pasajero durante todo el mes de enero. Un auténtico logro que dispara la estadística, porque en enero de 2017 este complejo no tuvo ni un solo viajero . En la casilla de ese mes se anotó un rotundo cero.

El Aeropuerto de Huesca-Pirineos -su nombre oficial- fracasó poco después de su inauguración. El Estado invirtió 40 millones de euros en su construcción . Cuando se inauguró, las autoridades derrochaban optimismo. Decían que iba a ser la gran puerta para el turismo del Prineo. Pero pronto se demostró que sobraba puerta ... y pistas, y terminal, y personal.

El aeropuerto cayó en picado en apenas un lustro. Tuvo conexiones con varias ciudades españolas e incluso con Londres. Pero eran insostenibles . En su mejor año, 2009, llegó a registrar 6.228 pasajeros. En 2013, con todo el tinglado desbaratado por los ruinosos resultados, la cifra se había desplomado hasta los 273 viajeros. Para entonces, apenas seis años después de su inauguración, el Aeropuerto de Huesca era ya una instalación fracasada. Pero seguía tragándose millones de euros de dinero público.

Sostener un aeropuerto abierto y sin actividad es económicamente demoledor. De ahí que, a principios de 2017, el dinero público que había triturado este aeródromo superaba ya ampliamente los 70 millones de euros: los 40 que costó, y los más de 30 millones que ya había consumido hasta entonces en gastos de mantenimiento.

Aena optó por recortar al máximo los costes, porque la situación era insostenible. Este «aeropuerto fantasma» llegó a tragarse cada día 9.000 euros en gastos de personal y mantenimiento para sostener instalaciones sin pasajeros.

Aragón: tres capitales, tres aeropuertos

El de Huesca es la oveja negra de la red de aeropuertos de Aena, pero también de Aragón. Esta región tiene un aeropuerto en cada capital de provincia. Pero los otros dos son un éxito hasta la fecha: el de Zaragoza es uno de los tres mayores aeropuertos cargueros de España , solo por detrás de Madrid y compitiendo con el de Barcelona; y el de Teruel, concebido como aeropuerto industrial y en el que no para de aumentar la actividad, la inversión productiva y el empleo.

Comentarios
0
Comparte esta noticia por correo electrónico

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Reporta un error en esta noticia

*Campos obligatorios

Algunos campos contienen errores

Tu mensaje se ha enviado con éxito

Muchas gracias por tu participación