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El presidente del Congreso, Mariano Rajoy, en la sesión de control al Gobierno - EFE
Congreso de los Diputados

Rajoy y Hernando escenifican en el Congreso su unidad para no conceder «ningún» beneficio político a ETA

Las bancadas popular, socialista y de Ciudadanos aplauden a ambos líderes

El presidente del Gobierno y el portavoz socialista exigen a la banda su desarme y disolución

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La banda terrorista ETA y su entorno han recibido un importante mensaje desde el Congreso de los Diputados este miércoles donde el jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, y el portavoz socialista, Antonio Hernando, han demostrado que caminan de la mano para conseguir el final del grupo armado sin contraprestaciones políticas.

«Corresponde al Gobierno y al Congreso conducir esta situación desde el criterio y el compromiso de unidad», ha afirmado el portavoz socialista durante la sesión de control, en alusión al comunicado de desarme enviado por el grupo armado el viernes de la semana pasada.

Un anuncio que ha calificado como una simple maniobra para «recuperar protagonismo». Un «acto de propaganda de aquellos que no han asumido su derrota ni han tenido el gesto ni el coraje de asumir el dolor que han causado», ha proseguido.

Además, ha advertido que ni podrá haber beneficios políticos para los terroristas ni el Estado abanadonará su lucha contra ETA hasta que la banda sea disuelta. «No podrá reivindicarse. El problema, más que las armas, son las manos que las empuñaron», ha remachado.

La bancada popular al completo, con el presidente del Gobierno a la cabeza, ha aplaudido la intervención. Ciudadanos, al observar la escena se ha sumado a los aplausos demostrando que la mayoría parlamentaria que coincide en esta dirección es absolutamente incontestable. Los diputados de Podemos se mantuvieron al margen.

Con su intervención, Hernando ha querido dejar claro que los socialistas consideran que la lucha contra ETA está por encima de la pelea entre partidos y que no la utilizará como arma para hacer oposición al Gobierno. Al mismo tiempo ha trazado una clara línea de separación respecto a Podemos al demostrar que el PSOE sigue siendo un partido con sentido de Estado capaz de alcanzar acuerdos con el Gobierno.

Rajoy ha arrancado su respuesta para señalar su coincidencia con el portavoz socialista «al cien por cien». Y ha subrayado que la postura del Gobierno no ha variado y se resume en que ETA es una organización terrorista con la que «no se negocia».

«No conseguirá ningún beneficio político. Si quiere desarmarse que lo haga ya y sin más dilaciones», ha urgido recordando que el único desarme de ETA que ha tenido lugar en España ha sido el que han llevado a cabo las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado. «La mejor manera de desarmarse es que diga dónde están las armas sin ningún tipo de negociación», ha espetado.

La bancada socialista ha replicado aplaudiendo aunque, a diferencia del PP sin unanimidad, lo que demuestra que la posición frente al final de la banda terrorista es un tema que sigue dividiendo a este partido.

De hecho, fuentes de este partido admiten que la intervención de Hernando no ha gustado a varios de sus compañeros que consideran que debía haber empleado el turno de preguntas para atacar al Gobierno y no para realizar una declaración institucional que puede llevar a cabo por muchas otras vías.

Otros apuntaban sus críticas directamente al contenido al considerar que mientras la banda no pase de los anuncios a los hechos, cualquier referencia política contribuye a su estrategia de propaganda.

Y eso aunque Hernando ha querido unir filas citando una frase del expresidente socialista, José Luis Rodríguez Zapatero. «España será una democracia sin terrorismo pero nunca sin memoria».

Sin concertar

Según el Gobierno y el PSOE, esta escenificación de unidad entre ambos no estaba acordada previamente aunque sí reconocen la existencia de conversaciones a raíz del comunicado de la banda. En concreto, el pasado viernes, entre el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, y Antonio Hernando.

Como prueba adicional de esta sintonía, el portavoz socialista ha decidido concentrar su tiempo en una única intervención, en lugar de las dos habituales, sin reservarse tiempo para contestar al presidente del Ejecutivo.

Es más, Antonio Hernando había registrado la semana pasada una pregunta diferente para el presidente del Gobierno, sobre el cumplimiento de los diez años de la Ley de Igualdad, y decidió cambiarla en la mañana de ayer para realizar esta intervención.

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