Los partidos se vuelcan en Andalucía, donde PSOE y PP se mantienen más fuerte

El sur de España se les ha atragantado a los partidos emergentes. El bipartidismo ha perdido fuerza en toda España, pero en concreto en Andalucía mucho menos que en el resto del país, y precisamente esta es la comunidad más importante en las elecciones por número de escaños. Se eligen 61 entre sus ocho provincias, y según la última encuesta de GAD3, el PP y el PSOE obtendrían hasta 43, el 70 por ciento. El CIS va más lejos y otorga al bipartidismo hasta 46 diputados, el 75 por ciento. Un peso más que respetable que ha llevado a todos los líderes políticos a volcarse en esta Comunidad.

El resultado del PSOE y PP en esta región, muy por encima de la media de cada partido en el conjunto de España, puede reforzar a sus líderes autonómicos, lo que en el caso de Susana Díaz cobra especial interés, sobre todo ante un posible desplome de Pedro Sánchez.

El PP sale a por el empate en Andalucía. El PP obtuvo en 2011 una estupenda cifra, 33 diputados, los mejores resultados de su historia en esta autonomía. Ahora no esperan tanto: según el CIS, se quedarían en un número de diputados de entre 19 y 21, frente a los 23-25 que lograría el PSOE. El resto van a parar mayoritariamente a las nuevas formaciones Ciudadanos y Podemos, que ni siquiera existían (a nivel nacional) hace cuatro años.

Pero los populares confían en poder superar incluso a las encuestas; los responsables regionales del PP no descartan el empate técnico con el PSOE, aunque reconocen que es complicado por la potente maquinaria con que cuentan los socialistas en el que ha sido su feudo desde hace más de 30 años.

Los argumentos con que defienden su optimismo son básicamente dos. De un lado, la tremenda renovación que han promovido en la región a la hora de confeccionar las listas al Congreso: hay cinco nombres nuevos entre los ocho cabezas de lista. De otro, una actitud diferente, mucho más receptiva, por parte de los ciudadanos hacia el mensaje del PP, que en este partido llevan semanas notando.

Por ejemplo, en las calles: «El clima ha cambiado», afirma Juanma Moreno, el presidente regional del PP. En efecto, como relatan otras fuentes populares, un paseo de Rajoy hace unos meses recibiendo parabienes y estrechando manos «habría sido impensable». Y no hay que irse muy atrás: la situación era muy distinta en marzo, cuando se celebraron las elecciones andaluzas.

El PSOE confía en repetir

La presidenta andaluza, Susana Díaz, aún confía en repetir los 25 escaños que logró el PSOE en las ocho provincias en 2011, aunque otras fuentes socialistas consultadas por ABC creen que el efecto emergente de Ciudadanos y Podemos sobre el PSOE en toda España también les va a pasar factura. De hecho, casi todas las encuestas dejan al socialismo andaluz en un máximo de 23 escaños que, a la luz de los sondeos generales para toda España, pueden acabar siendo un 30% del Grupo Socialista en el Congreso.

Díaz ha dicho que ella sale «a ganar» y que con esa victoria -todas las encuestas dan que el PSOE solo ganará en Andalucía y Extremadura- el partido puede superar esta hora difícil en la que el partido que ha gobernado 21 años en democracia puede acabar bajando de los cien escaños.

Ciudadanos inicia hoy una gira de dos días por Andalucía, donde se mantiene a distancia aún de los dos grandes. «Estamos seguros de un buen resultado, y de que Andalucía va a ser importante en el futuro grupo parlamentario en el Congreso», apunta José Manuel Villegas, director de la campaña de Ciudadanos.

Rivera pasará dos días completos en Andalucía. Esta mañana tendrá un acto en las calles de Cádiz, para después trasladarse a Sevilla, donde por la tarde celebrará el mitin central de la campaña en Andalucía en Sevilla. Mañana miércoles tendrá intervenciones en Granada y Málaga. En todos estos actos estará acompañado por Inés Arrimadas, la presidenta del grupo parlamentario en Cataluña, natural de Jerez de la Frontera. El partido ha querido reforzar la presencia de Rivera en Andalucía con la única dirigente capaz de hacer sombra a Rivera en cuanto al fervor militante. Arrimadas se quedará un día más para mantener una reunión el jueves en Jaén con mujeres empresarias.

El partido tratará de explicar estos días las bondades de su acuerdo con Susana Díaz, aunque ha dejado ver mayores concesiones con los socialistas que en las autonomías donde da sustento de Gobierno al PP. «Andalucía es la región junto con Extremadura en la que mejor aguanta el bipartidismo», constata Villegas. «Son territorios más conservadores, no en lo ideológico, sino en el de ser más reacios al cambio de voto».

El pacto PSOE-Ciudadanos

El bastión andaluz, de tradición socialista, es tierra hostil para Podemos. En el partido creen que, pese a que su discurso podría tener cabida en una región acostumbrada a votar a la izquierda aun cuando casi todo el mapa español se tiñó de azul, el perfil de sus dirigentes territoriales autonómicos ha perjudicado su implantación.

Iglesias escogió Cádiz y un 4 de diciembre para abrir campaña y escenificar la tregua con el que hasta hoy es su núcleo territorial más rebelde. Teresa Rodríguez, al frente de Podemos en la región y muy ligada a la Izquierda Anticapitalista, se enmarca en el sector crítico con la dirección y se resiste a adoptar el giro moderado con el que Podemos pretende atraer a las mayorías. En Andalucía, Iglesias y su equipo son vistos como forasteros de Madrid. Con el Partido Andalucista disuelto, Podemos quiere recoger las reivindicaciones de quienes votaron a los nacionalistas en detrimento del PSOE.