«Mytaxi ya era un éxito antes de Uber»

La fusión de Mytaxi y Hailo aspira a revolucionar el sector. El CEO de la empresa en España y Portugal, Antonio Cantalapiedra, se muestra convencido de que reforzarán su posición en Europa hasta alcanzar el liderazgo en el viejo continente. La compañía se queda prácticamente sin competidores de entidad en cuanto al taxi, aunque planean en el entorno plataformas como Uber y Cabify.

¿Por qué han decidido dar el paso de esta fusión?

Teníamos un plan, que era convertirnos en la primera «app» de Europa. Lo estábamos consiguiendo, pero tenemos que acelerar el ritmo. La fusión tiene sentido porque están en mercados donde no estábamos, salvo en España. En España tendremos que hacer una migración intensa, fusión de equipos, pero eso nos va a reforzar aún más la posición aquí.

Es el sentido del movimiento, convertirnos en la primera «app» de referencia de taxis en Europa.

¿Qué esperan que les aporte la fusión?

Nos va a aportar volumen. Va a mejorar el producto de Mytaxi. Todo va a migrar a Mytaxi, pero muchas cosas de Hailo serán posiblemente implementadas aquí. Nos va a aportar conocimiento, sabiduría... No solo para manejar el mercado sino poder gestionar las flotas mejor. Conseguir que la movilidad en las ciudades se haga más rápido y mejor.

¿Cómo puede beneficiar esto a conductores y pasajeros?

Va a traer muchas mejoras tanto en la aplicación como en la gestión porque se ha convertido en un monstruo por los clientes y afiliados. Esto va a ser bueno para el cliente final de Mytaxi porque máximo dentro de un año esta marca se comerá a Hailo. Vamos a poder servir al ciudadano mejor, con más recursos, sabiduría, sabiendo lo que le gusta más a los pasajeros... Con los taxistas tendremos más volumen y podremos reforzar la cobertura dentro de la ciudad.

¿Está suficientemente arraigado este método en Europa?

Cuando veo las cifras de pago a través del móvil, creo que está bastante arraigado, en un segmento más de ejecutivo y entre 20-40 años. Estamos en la dirección de que esto al final sea la manera de pedir el taxi y las maneras tradicionales sean residuales. Pero deben existir porque habrá gente que no dará ese paso. Vamos a dar un salto muy importante a nivel europeo.

¿Se está «comiendo» su sector al método tradicional?

Sin duda. Es muy cómodo hacerlo. Luego puedes llevar una cuenta de todos los pagos, aceleras las transacciones. Incluso ya se habla de la introducción de «bitcoin». El dinero físico se va a reducir cada vez más. En España la penetración de pago por móvil está siendo tremenda, e incluso ahora lo va a copiar hasta Inditex.

¿Qué nivel de seguridad tiene el método de pago por móvil?

Tenemos un nivel de encriptación bastante alto. Muy pocos problemas, nada relevante. Y si sucede algo tenemos un equipo de seguridad que podría arreglar cualquier agujero. La seguridad es alta.

¿La fusión tiene que ver con el éxito cosechado por plataformas como Uber y Cabify?

Mytaxi ya era un éxito, aunque esté mal decirlo. No hacemos esto en contra de nadie ni para competir con nadie. Seguimos nuestro camino, y tecnológicamente somos amigos de la economía colaborativa. Hemos discrepado de la fomra en que han entrado en el mercado, en el caso de Uber como pistoleros en su forma antigua. Podemos convivir todos. Empresas como Uber, Cabify y nosotros podemos aportar cosas y el que aporte más cosas al cliente se llevará el gato al agua. No creo que sea una batalla contra nadie. Uber seguirá su camino y el nuestro es aparte.

Entonces, ¿quién considera que son sus competidores en el mercado?

Si hablamos de Cabify y Uber en España, llega un momento en el que incluso Car2go que es de la casa puede ser competidor. Nosotros queremos que nuestra solución de movilidad sea la mejor, que el taxi sea «premium». Luego también las antiguas emisoras, que tienen clientela y son competidores. Pero el principal competidor que teníamos era Hailo y al fusionarnos se acaba. Ahora los demás se pueden ver como competidores pero nosotros tenemos un plan y con esta fusión vamos a conseguir ser la aplicación líder en Europa.