Real Murcia-Cádiz CF: Lo que pudo ser y lo que debe ser

El Cádiz CF visita la Nueva Condomina con la resignación de lo que pudo ser y no fue, y con la obligación de luchar por lo que debe ser pues está al alcance hasta de la mediocridad de este plantel. El cuadro gaditano ha perdido la fe, los propios futbolistas se la han arrebatado al cadismo y a ellos mismos. Nadie encara el duelo de este domingo al mediodía con el Real Murcia como una final por el campeonato. Con 11 puntos por diferencia y dos rivales más por encima sería engañar al respetable.

Primer fracaso consumado. Con ese lastre hay que vivir la temporada porque esta pifia admite remiendo. Ahora la meta es clasificarse para la promoción de ascenso, mantenerse entre los cuatro primeros y pescar una segunda o tercera plaza como mal menor, con UCAM y Sevilla Atlético en disputa.

Así de triste para una hinchada que ya sabe de la fiabilidad de su Cádiz CF en esas eliminatorias, y hay mucho que temer.

De ahí que sea tan peligroso este cambio de tercio, ante la pérdida de motivación. Claudio ya mentalizado a sus pupilos de que hay que ir a partido a partido, que ganando todos tienen el ascenso aún en sus manos, no depende más que del Cádiz CF. Pero el propio entrenador ha perdido mucha credibilidad y eso lo aprecian sus jugadores.

El técnico levantino, notable la campaña pasada, no ha dado con la tecla en todos estos meses y ha revolucionado la plantilla en enero para dejarla todavía peor.

Para colmo, será privado de jugadores importantes. La expulsión infantil de Carlos Calvo y la doble amarilla a Servando se suman a la decisiva de Dani Güiza en ataque. Las dos primeras ausencias son subsanables pues este grupo se caracteriza porque quien salga lo hace igual que mal que el jugador sustituido. Pero con el jerezano es otro cantar ya que Despotovic se encuentra en plena pretemporada después de muchos meses de inactividad.

Otro oportunidad para el serbio

El serbio se perfila como la referencia en la medular en un estadio que sería su hogar hace unos años. Por detrás, Salvi es fijo al igual que Lolo Plá y Álvaro merece una oportunidad, pero por esa banda izquierda parece que Machado y Jandro se disputan el puesto.

Migue será la pareja de baile de Aridane en una zaga con dos carrileros murcianistas. Por supuesto, sin canteranos del Cádiz CF, pues el único (Alberto Quintana) se quedó con el filial y el otro (Tomás) ya se marchó al Granada B de Quique Pina.

Que el campeonato se dé por perdido no significa que el encuentro sea de trámite. Hay mucho en juego. El Granada B (el de Tomás) vencía en casa al Jumilla y se coloca a cuatro puntos de los amarillos (con la diferencia de goles a favor). A dos empates de dejarle sin ‘play off’.

Además, Claudio lleva varias semanas jugando con fuego y las llamas arden cada vez más cerca de su rostro. Cuesta pensar que el club le permitirá otra derrota sin tomar decisiones drásticas.

Y en cuanto al equipo, a los futbolistas, el duelo de la Condomina representa una prueba magnífica para medir el verdadero potencial de este Cádiz CF en las grandes citas. Ha mostado irregularidad y apatía durante el campeonato, pero en un hipotético ‘play off’ cambian las circunstancias y esta escuadra es imprevisible.

El mejor equipo del grupo

Aguarda el Real Murcia, el líder indiscutible,el mejor equipo de este campeonato. Un conjunto muy ofensivo, que posiblemente juegue con un centrocampista como central, sin un pivote defensivo claro y con tres delanteros más la pujanza ofensiva de Chavero (que regresa tras su sanción). Con menor presupuesto pero con un plan, el de su flamante entrenador José Manuel Aira, se dispone a rubricar su primer puesto que comenzó a fraguar hace una vuelta de forma triunfal en el Ramón de Carranza.

El pichichi Carlos Álvarez, al que sólo le dio cariño la afición cadista en su periplo en la Tacita, lidera el caudal atacante junto a Azkorra y Germán. Dejó para la anécdota su participación en la portería la pasada jornada, cuando expulsaron al arquero Fernando. Este domingo será Simón quien guarde el arco.

Muchas cosas en juego en Murcia. Muchas, pero no el campeonato.