Las pequeñas gitanas. Los niños son los que mantienen los trajes tradicionales para acudir a la Feria. :: C. C.
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El día que da sentido a la fiesta en La Magdalena

La festividad del Carmen es el origen de la Feria isleñaLa patrona de la ciudad llega a un recinto ferial que de nuevo demuestra por qué es tan difícil que se pueda vivir de día, aunque de noche es una mezcla de ambientes

SAN FERNANDO. Actualizado: Guardar
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Es el día que da sentido a la fiesta porque sin la Virgen del Carmen no se hubiera desarrollado la Feria. La patrona de la ciudad, su alcaldesa perpetua, la reina de los mares que navega por el caño de Sancti Petri para pisar el recinto de La Magdalena. Un espacio que de nuevo demostró por qué resulta tan complicado que se pueda vivir de día y es que el intenso calor hizo mella en la jornada de ayer. Las altas temperaturas resultan insoportables en las casetas y solo el Día de la Mujer parece que empuja a que se haga más liviano y que se impongan las ganas de fiesta.

Pero ayer no. De hecho hubo años en los que se llegó a plantear la posibilidad de retrasar la Feria a septiembre, algo que no se llegó a hacer porque entonces perdería toda su esencia ya que rinde homenaje a la Virgen del Carmen, cuya celebración es el 16 de julio. Así que habrá que buscar nuevas fórmulas para arañar horas al reloj y vivir la fiesta desde más temprano, algo que agradecerían caseteros y feriantes. Así lo hicieron ver en la primera jornada de Feria, en la que no hacía tanto calor y en la que la reducción del precio de los cacharros, al ser el Día del Niño, permitió que a las nueve de la tarde el recinto luciera una estampa que no se vio ayer.

Los esfuerzos se han centrado este año en hacer una Feria de Día pero en el centro de la ciudad. La Asociación de Comerciantes de San Fernando (Acosafe) es la que promueve esta idea y los establecimientos también han apostado fuerte. Hacen promoción en los locales, que al menos cuentan con aire acondicionado, y en las redes sociales. Actuaciones, música y ambiente. Los arranques siempre son complicados, es el primer año que se hace, pero parece que por el momento puede tener futuro. Habrá que esperar a que acabe la Feria y se haga una valoración por parte de los hosteleros y comerciantes de la localidad para ver si prosigue o cae en el olvido.

De lo familiar a la Juventud

Es cierto que resulta complicado ver trajes de gitana y caballos en la Feria del Carmen y de La Sal. También es que es una fiesta que se vive más de noche y que contiene una mezcla de ambientes curioso en un poco margen de tiempo. Pues mientras el Sol se va apagando comienzan a llegar las familias con la intención de dar un paseo tranquilo, montar a los niños en alguna atracción y luego cenar en una u otra caseta. Conforme avanza la noche, llegan los grupos de adolescentes que van directamente a los cacharros y mientras se montan en los coches choques hacen paradas para probar suerte en las casetas de habilidades y comer una hamburguesa, un bocadillo o cualquier otra cosa.

Cerca de la medianoche llega otro grupo de jóvenes, esta vez con bolsas en la mano, donde guardan las bebidas alcohólicas y cuyo sitio de quedada es en la portada o en la rotonda del interior, este año adornada por un paraguas de luces. Allí una vez se reúnen todos, acuden al paseo de La Magdalena, su coto privado, un lugar de reencuentro entre amigos que hacen tiempo que no se ven, entre aquellos a los que se ven todos los días y los que se acaban de hacer. Estrechar lazos y sobre todo preparar el cuerpo para las pistas de baile.

El ahorro es la razón de la botellona, ya que en las casetas las bebidas salen mucho más caras. Eso sí como muy tarde a las dos de la mañana a acudir a las casetas con los últimos éxitos en temas actuales. Las sevillanas quedan para la hora del cierre.

Aunque se está dando un fenómeno curioso. En años anteriores, como consecuencia de la crisis, eran muy pocas las actuaciones que se hacían en directo. Se apostaba por equipos de música potentes o por pequeños grupos que tenían casi todo grabado a excepción de voz y órgano. Ahora las casetas apuestan otra vez por la música en directo.

Lo hacen trayendo grandes orquestas con montajes complicados de luces y hasta imágenes o incluso por artistas que están empezando su carrera, aunque ya tienen un nombre, o que se han especializado en este tipo de eventos. Puede que sea un signo de recuperación. Algo que no se ha notado en el número de casetas, ya que siguen siendo poco más de cuarenta, que el año pasado fue el peor dato de participación de colectivos en una Feria. Poco a poco.

Las mujeres toman el recinto

Y hay poco tiempo para el respiro porque hoy llega la única jornada que triunfa con el Sol en lo más alto. El vuelo de los volantes, el colorido de los lunares, las peinetas, las sevillanas, hoy sí se imponen en el recinto. Hace años que el Día de la Mujer se ha consolidado dentro de la Feria como su gran jornada de día, sin importar la calor.

Hace años se desmadró las celebraciones con boys y gogós pero ya se ha normalizado, aunque hay casetas que siempre ponen el toque picante al evento. Como ya es tradición a la una y media de la tarde se realizará en la Plaza Iglesia una concentración de mujeres, alentada por el Ayuntamiento para acudir en grupo al recinto de La Magdalena donde los caseteros esperan con los brazos abiertos.

Charangas, promociones, ofertas en los menús, degustaciones, concursos de trajes de flamenca. Una jornada variada y distinta que anuncia la llegada del fin de semana. Ya llega el ecuador de la fiesta y de las jornadas locales se pasarán a aquellas en las que se abre a toda la Bahía. Pero aún quedan días de fiestas, para disfrutar de una u otra manera. Para vivir la Feria en las casetas, los cacharros o el paseo marítimo.