Trabajos de autorrehabilitación en el barrio de El Puche (Almería). :: C.FOMENTO
ANDALUCÍA

Fomento ensaya nuevas maneras de habitar los barrios marginales

Huertos urbanos, autorehabilitación, participación en el diseño de las zonas comunes, una forma diferente de intervenir en la ciudad

SEVILLA. Actualizado: Guardar
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Bajo el nombre de Habitar 2.0, la consejería de Fomento y Vivienda lleva a cabo un original programa de intervención en barriadas marginales de Andalucía, que responde a una nueva filosofía basada en la participación ciudadana y en otra manera de concebir la actuación urbanística. El plan está sostenido con fondos europeos PROCTEFEX y extiende su ambición a la cooperación transfronteriza, hacia el norte de Marruecos.

Las zonas de actuación son los barrios almerienses de Chanca y Puche; San Martín de Porres, en Córdoba; Almanjayar en Granada, Polígono Sur, en Sevilla y las barriadas de Saladillo y Piñera en Algeciras. Al otro lado del Estrecho, las zonas elegidas son los barrios de Hnain y Dhar Ben Ayad en Chefchaouen.

El programa, dotado con un millón y medio de euros financiado al 75% por la UE, ha sido puesto en común estos días en la ciudad marroquí, donde técnicos de ambos países han intercambiado experiencias. Gaia Redaelli, directora general de Rehabilitación y Arquitectura, explica que se trata de una apuesta por «cambiar el modelo de política de vivienda, con la rehabilitación como eje principal, porque contribuye a hacer la ciudad más sostenible y porque genera empleo en el sector de la construcción» y también por «el sector social más vulnerable, el que vive en el parque público de viviendas», cuyo abandono por parte de las autoridades autonómicas reconoció.

Habitat 2.0 persigue involucrar a los vecinos en la gestión y la conservación de su barrio. Las iniciativas son novedosas y, según Redaelli, eficaces. Así, en El Puche se intenta que los vecinos de la zona, muchos parados de la construcción trabajen en la autorehabilitación del barrio. En San Martín de Porres, en Córdoba, talleres de niños y jóvenes deciden cómo actuar en el espacio entre los bloques y plantan árboles y zonas ajardinadas para hacer más habitables las zonas comunes. En El Saladillo, en Algeciras, se prepara un encuentro de artesanos marroquíes y andaluces, a modo de zoco, que revitalice el barrio y que incorpore comercio y turismo.

Apuesta por el comercio

La apuesta por el comercio es común para reactivar estas barriadas y Fomento ha optado por convocar a la participación vecinal para ceder los locales comerciales de los bajos a fin de darles uso, por ejemplo, en La Chanca.

En Almanjayar hay dos proyectos en marcha: «Nortelanos», la creación de huertos urbanos, destinados al autoconsumo, y «La plaza crea», que transforma la plaza Merced Alta tantro en mejoras urbanísticas como en la identificación de la población con su espacio.

«No hemos querido gastar el dinero solo en obras», dice Gaia Redaelli, queremos poner en marcha sinergias y establecer mecanismos que puedan perdurar en el futuro».