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Por amor al arte

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La semana pasada se celebró en el Baluarte de la Candelaria la muestra de artesanía de Carnaval que organizan los profesionales de artes plásticas de Cádiz ARTECAR. Grandes artistas se dieron cita. Cuando digo artistas no me refiero a esos que encontramos en nuestro concurso que con tan sólo haber escrito un cuplé mediocre ya asumen ese rango de virtuoso para toda la vida, no. Me refiero a artistas con mayúsculas. Empresas como Ras, de Antonio Quintana y Ricardo Lores, o la del presidente de la asociación Manuel Sánchez Artifex en escenografías, o Planning en carrozas diseñadas por José Antonio Migueles y bajo la gerencia de Carlos Marcos, demuestran que están a la vanguardia de su categoría demostrándolo cada año en su progreso e innovación. Otras como Quatro decoración experimentada, o Achicarte con Juandi Aragón y Sonia Espinosa o la de Alejandro Mariño deslumbran en sus trabajos con atrezzos, telones, figuras, sombreros o labores en gomaespuma que dejan impresionados y boquiabiertos al que los contempla. Otros más noveles como Nieves Iglesias (Pepi Mayo), dan signos de gran destreza en eso de la costura al igual que las ya veteranas empresas del sector como El Vestidor o Aurora Marchante, y qué decir de la aguja de oro de este año, la empresa Crearte PLJ Creaciones de Pablo Jiménez o la de Piarle Maquillajes de Pilar Arjona, que clausuró la semana con un pase de modelos pintadas por alumnos de su escuela y que distingo con un sólo nombre, 'MAGISTRAL'. Todos ellos sin remedio se han ganado a pulso ese título de artista que aquí ponemos a cualquier memo que canta medio bien, ellos están en la sombra casi siempre llevándose los méritos otros, así de cruel es el mundo del espectáculo. Pero lo más cruel de todo es el abandono por parte de las instituciones, a excepción del Consistorio que colabora al menos con alguna subvención. Diputación y la Junta, ni un duro, cajas de ahorros y bancos, menos cero, multinacionales y grandes centros comerciales, nada de nada, de vergüenza.

Una exposición por amor al arte, nunca mejor dicho.