La torre de la iglesia de Villamartín, en peligro de derrumbe

Tras el derrumbe de una parte importante de lo que quedaba de la Torre de Pajarete, del Castillo de Matrera del Siglo XIII, en Villamartín, el temor a perder otro de los símbolos de la localidad ha asaltado a los vecinos. Un grupo de feligreses y cofrades, junto con el párroco José Manuel González, han dado a conocer la situación que desde hace dos años viene sufriendo la torre de la Parroquia de Nuestra Señora de las Virtudes.

El problema que sufre la instalación religiosa es extremadamente preocupante porque «se está produciendo un desplazamiento del terreno de la ladera sobre la que se encuentra instalada», destacan los estudios técnicos que se han realizado en la misma, por lo que la solución se antoja complicada y costosa. En concreto, se necesitarían unos 400.000 euros para la reparación y el párroco asegura que «habrá que conseguirlo en el propio pueblo porque desde otros sitios ya nos han informado que no podremos recibir ayuda, incluyendo al Ayuntamiento que no tiene capacidad para hacerse cargo de esto».

La solución técnica que se baraja para evitar que las grietas sigan creciendo y se produzca el derrumbe es la inyección de hormigón armado en el suelo, rodeando a todo el templo. La parroquia se encuentra saturada con la ayuda social que presta a los vecinos y no puede hacerse cargo de esta costosa obra, como tampoco pueden afrontarla la Junta de Andalucía o la Diócesis, por lo que ya se ha comenzado a poner en marcha las primeras muestras de solidaridad y ayuda desde que el cofrade Francisco Gil Solano diera la voz de alarma de esta situación. Tres arquitectos ya han pasado por el templo para estudiar la situación del mismo y se ha optado por el cierre preventivo de la capilla bautismal, que se encuentra con la bóveda partida y con muchas grietas.

No obstante, según ha podido saber LA VOZ, los arquitectos del obispado y el Ayuntamiento han apuntado a una posible salida alternativa que se cree que podría solucionar el problema, sin necesidad de llevar a cabo una inversión tan elevada, como la que supondría la creación de unos nuevos cimientos, prácticamente. En concreto, ambos técnicos aseguran que un pilotaje podría evitar un trágico desenlace, una actuación que tendría un coste de entre 40.000 y 60.000 euros, haciendo mucho más accesible el arreglo.

Solidaridad

Las iniciativas solidarias para salvar el templo ya se han puesto en marcha. En concreto, este mismo fin de semana se ha celebrado una fiesta campera en la finca de 'El Molino' para recaudar fondos, y la Hermandad de Nuestra Señora de las Montañas también ha anunciado su intención de colaborar con la recaudación de parte del dinero necesario para salvar la parroquia, sea cual sea la salida técnica que finalmente se ponga en marcha. Esta hermandad cederá todos los beneficios que se recauden tras la peregrinación al santuario que se llevará a cabo el próximo domingo. Además, en la localidad se están organizando otras iniciativas que irán viendo la luz poco a poco.

El alcalde, Juan Luis Morales (PA), ha reconocido el problema y «la imposibilidad del Ayuntamiento de hacer frente al mismo». No obstante, han trasladado a la parroquia a toda la feligresía el total apoyo del Consistorio ya que «respaldaremos todas las acciones que se lleven a cabo y aportaremos todos los medios personales y materiales que están en nuestra mano para que se desarrollen estas iniciativas».