Sin rastro de las ayudas de Gadir Solar

CEn marzo del año pasado se venía abajo uno de los iconos de la reindustrialización de la Bahía. La empresa Gadir Solar, especializada en la fabricación de paneles fotovoltaicos de última generación, echaba el cierre tras 32 meses de actividad, de los que doce fueron bajo un ERTE y con la producción bajo mínimos. No pudo afrontar la crisis del sector energético. Un año después del cierre, la Junta le reclama la devolución de 14,6 millones de euros en ayudas.

La dirección trató sin éxito de mantener a flote el negocio mediante la aplicación de una regulación temporal de empleo a su plantilla en agosto de 2011. Además buscó de manera infructuosa nuevas fórmulas para refinanciar su deuda. Sin embargo, su producción no encontraba hueco en los mercados. Gadir Solar consumó su cierre en mayo de 2012, ahogada por las deudas y sin indemnizar a su plantilla. La única salida que le quedó fue el concurso de acreedores ante un agujero contable de 50 millones de euros. Un total de 196 trabajadores se fue a la calle sin finiquito y hoy todavía la plantilla sigue demandando a la empresa los papeles para que el Fondo de Garantía Salarial (Fogasa) asuma el pago de sus últimas nóminas.

El cierre de Gadir Solar trasciende más allá de lo puramente laboral. Su desaparición ponía en entredicho el famoso Plan Bahía, ideado por la Junta en 2008 para reactivar la comarca gaditana tras el cierre de Delphi. Como se recordará este plan tenía como objetivo captar inversiones para la Bahía con el fin de paliar el terremoto provocado por la deslocalización de Delphi, que despidió a casi 2.000 trabajadores en febrero de 2007. De esta forma, la Junta y el Ministerio de Industria, a través del 'plan Reindus', sumaron fuerzas para atraer inversiones a golpe de ayudas públicas y favorecer con ello la promoción del suelo industrial de la Bahía. La Junta llegó a anunciar la llegada de una docena de empresas pero, finalmente, sólo Gadir Solar y la aeronáutica Alestis, impulsada y participada, precisamente, por el propio Gobierno regional, fueron las únicas que se asentaron en la Bahía. El resto de proyectos anunciados se quedó a mitad de camino debido, sobre todo, a los primeros efectos de la crisis. Este es el caso, por ejemplo, de Aeroblade, empresa que tenía previsto abrir una planta en el Trocadero para la fabricación de las palas para los molinos eólicos. Tampoco cuajó la iniciativa empresarial sobre las elaboración de biodiesel en La Cabezuela.

Tanto Alestis como Gadir Solar recibieron importantes ayudas públicas por el fomento de la contratación. Así Gadir Solar, del Grupo Aurantia, abrió sus puertas en el polígono del Trocadero el 27 de septiembre de 2009. Más de la mitad de su plantilla procedía de la extinta factoría de Delphi.

El Grupo Aurantia invirtió en el montaje de su nueva planta gaditana 73 millones de euros, de los que 14,6 fueron a través de incentivos públicos. La Junta lleva seis meses reclamando la devolución de este importe, ya que la empresa, con su cierre, ha incumplido los compromisos que adquirió en materia de empleo, investigación y desarrollo.

Los sindicatos denunciaron en su momento varias irregularidades detectadas. Así, una de las primeras anomalías que apuntaron fue la compra-venta de los terrenos que ocupa la factoría en el polígono del Trocadero. El Grupo Aurantia pagó por ellos 3,6 millones de euros en 2009 y luego vendió el solar por 13,5 millones. La dirección de la empresa firmó con el nuevo propietario un contrato de alquiler.

Sin embargo, la principal denuncia tanto de los trabajadores como de los propios sindicatos se centra en la cantidad ingente de subvenciones públicas que recibió esta empresa para su instalación en Cádiz. La delegada provincial de Economía, Innovación y Empleo, Angelines Ortiz, aseguró a LA VOZ que el expediente para recuperar el dinero sigue su curso y ahora se actuará contra el Grupo Aurantia ante la imposibilidad de cobrar a Gadir Solar. El expediente de reintegro de los 14,6 millones de euros se abrió el 8 de octubre de 2012, cinco meses después del cierre.

Los sindicatos, por su parte, aseguran que la empresa ha recibido más ayudas de las que reclama la Junta, «porque hay que contar también el dinero que percibió a fondo perdido». Este periódico ha podido saber que la empresa recibió tres grandes aportaciones de la Administración regional entre 2007 y 2011. La primera inyección partió de la Agencia IDEA el 12 de diciembre de 2007 con un incentivo directo de 16,2 millones de euros para levantar la planta. Este incentivo se fijó, posteriormente, en 14,6 millones que es, precisamente, el que ahora se reclama su devolución.

La segunda aportación fue del Servicio Andaluz de Empleo (SAE) que aprobó la concesión de una subvención de 909.000 euros por contratar de manera indefinida a 101 trabajadores procedentes de la antigua factoría de Delphi. Esta ayuda forma parte del incentivo al fomento de la contratación. La primera aportación se hizo en enero de 2008 y en noviembre del mismo año, la Agencia IDEA adjudicó a la empresa 3,26 millones de euros por la incorporación e una nueva línea productiva.

La última ayuda data del 13 de enero de 2011, seis meses antes de aplicar el ERTE, donde la Agencia IDEA adelantó 5,5 millones de euros como aval ante una entidad de crédito. Este periódico se ha puesto en contacto con la oficina del consejero delegado de Gadir Solar, David Naranjo, pero no ha tenido respuesta sobre la ayuda que se le reclama.

Gadir Solar también recibió ayudas del Ministerio de Industria, procedentes del denominado 'plan Reindus'. La primera asignación ascendía a 7,7 millones de euros para la construcción de la planta en 2009 y la segunda fue de 2,5 millones para la ampliación de la factoría, en noviembre de 2010.