Los bares de la capital pagarán un 15% más por tener mesas y sillas en las terrazas

Con el Año Nuevo llegaron las modificaciones en las ordenanzas fiscales, que traducido resulta una subida en las tasas municipales de un 6% de media. En 2013 será más cara la Zona Azul, el uso de las instalaciones deportivas, el servicio de bomberos y de grúa, la reserva de las aceras para garajes, la tasa por tener un puesto en el mercado, pero el sector que más sufrirá el encarecimiento de los precios públicos en Cádiz será el hostelero. A partir de ahora, bares, cafeterías y restaurantes pagarán un 15% por tener mesas y sillas en las terrazas. Es el porcentaje más alto, que no el valor, de todas las subidas incluidas en las ordenanzas. Según esta actualización de precios, el hostelero pagará un mínimo de 9,45 euros al trimestre por cada mesa y cada silla que ponga en la terraza. Este coste se multiplica por 1,5 si la terraza está cubierta por un toldo o por cualquier elemento análogo. En estos casos, el propietario del bar pagará 14,17 euros por unidad al trimestre.

El concejal de Hacienda del Ayuntamiento de Cádiz, José Blas Fernández, reconoció que esta es la subida más importante en las nuevas tasas pero apuntó que el precio de las terrazas en Cádiz, incluido lo que se paga por mesa y por silla, es bastante más barato que en otras ciudades, «aunque no deja de ser un lástima tener que subir algo a este sector, pero hay que recaudar algo más».

El presidente de los hosteleros de la provincia Horeca, Antonio de María, reaccionó como representante del sector mostrando su preocupación por que se «suban los impuestos a los empresarios con menor margen», y añadió que el debate «no es si en Cádiz es más o menos barato poner mesas y sillas, sino que hay que tener más sensibilidad con un sector que es el único que genera empleo en la ciudad».

El presidente de Horeca es hostelero de profesión y propietario del restaurante San Antonio, ubicado en la plaza del mismo nombre, en la que coloca cada día que el tiempo lo permite ocho mesas con sus respectivas sillas. «El problema no es lo que paguemos al trimestre sino qué reportará esto a las arcas municipales. No creo que solucione mucho al Ayuntamiento y sí es un gasto más para el hostelero, especialmente para los que tengan muchas, como los de la plaza San Juan de Dios».

En el mismo sentido se pronunció el dueño del bar El Malagueño, Antonio Gallardo, quien tiene algunas mesas en su terraza de el Pópulo. «Esta medida va sacar aún más del que menos puede. Parece mentira que una ciudad que se debe al sector hostelero lo cuide tan poco», resume Antonio Gallardo entre carreras atendiendo a los parroquianos que copaban el bar alrededor de las ocho de la tarde de ayer, mientras pasaba la cabalgata de los Reyes Magos del histórico barrio gaditano.