La protesta viva del Bar Rincón

Los carteles de protesta del bar El Rincón han cobrado vida. Desde hace una semana, uno de los clientes y amigo del dueño de este establecimiento recorre cada mañana la plaza de San Juan de Dios con un gran cartel en el que denuncia la situación que atraviesa el pequeño empresario. El mensaje que porta es claro: «El bar El Rincón acorralado por las obras de la plaza San Juan de Dios tiene pendiente el pago de 6.000 euros... solicito al Ayuntamiento ayuda, necesito una solución urgente». A pocos metros, José Carrasco, dueño del establecimiento ve cada mañana como los clientes pasan de largo, «ya ni siquiera se asoman». Carrasco denunciaba semanas atrás la colocación de una valla que le impedía poner mesas en la terraza y dificultaba el acceso a su establecimiento. Lejos de mejorar, su situación personal y la de los hosteleros que comparten calle ha empeorado. «Nos han levantado toda la acera y en las esquinas hay dos grandes carteles que recomiendan a los peatones no pasar por delante de los bares».

Se siente un poco solo en la lucha porque uno de los negocios ya ha cerrado, otro «es un restaurante chino que no quiere meterse en problemas» y el cuarto tiene entrada por la calle Plocia. Aún así no piensa renunciar. «No me lo puedo permitir. Debo ya unos 6.000 euros en concepto de alquiler, agua, luz, proveedores...» una deuda que no puede hacer frente si no vienen clientes «y si no tengo acera cómo van a venir».

José Carrasco se mostraba semanas atrás comprensivo con las obras pero su paciencia está llegando al límite. «No entiendo porqué han tardado tan poco en arreglar las aceras que lindan con los bancos y la nuestra lleva más de tres meses levantada sin que parezca que haya avances». Este empresario gaditano critica además la falta de información por parte del Ayuntamiento. «Se supone que deben pasar por aquí todos los días para ir a trabajar pero ninguno de ellos se ha detenido a preguntar ni han venido para informarnos de cuánto va a durar la obra». Carrasco reconoce que sí que hubo una reunión, «pero antes de empezar a levantar la plaza y comenzasen los retrasos».

Este hostelero afirma que se siente como David luchando contra Goliat y no sabe como asumir la situación. De momento ha entregado un escrito en el Ayuntamiento en el que explica los daños que le están ocasionando las obras y reclama una indemnización por daños y perjuicios de 5.000 euros con los que pagaría los gastos de estos meses en los que su clientela se ha visto reducida.

Fase final

Las obras que perjudican de forma directa a José Carrasco son las ejecutadas por Aguas de Cádiz que está realizando el desvío de instalaciones de telefonía y aumentando las canalizaciones de la red de agua. Estos trabajo se están ejecutando de forma paralela a la primera fase de remodelación de la plaza San Juan de Dios. Fuentes municipales explicaron que en el plazo de una semana concluirá la obra de Aguas de Cádiz y procederán a colocar la nueva pavimentación.