Ciudadanos

DESAHUCIOS

CONCEJALA DE BIENESTAR SOCIAL Actualizado: Guardar
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Hoy son de estas mañanas de trabajo en las que necesitas expresar, aunque sea a través de estas líneas, y aunque seas consciente de que va a haber muchas personas que quizá no lo entiendan o que no quieran escuchar, cómo se crea una frontera que divide los desahucios en «desahucios de primera» y «desahucios de segunda».

Los de «primera» arropados y abanderados por un movimiento asociativo que domina casi a la perfección el poder y la magnitud de las redes sociales, que es capaz de posicionarse a la cabeza de salida gracias a esa fuerza que todos sabemos lleva implícito el aparecer en los medios de comunicación. Que es capaz de utilizar a su antojo ese poder mediático para captar una mayor atención, pensando que está ahí la solución a su problema. Quizá imaginando que haciendo más ruido que nadie, conseguirá su objetivo en menos tiempo. Una realidad que se puede convertir en un arma peligrosa que sólo conlleve severos agravios comparativos a los que no siguen este camino y que sin embargo, casi con toda certeza están en situaciones similares e incluso peores.

En el otro lado de la balanza, nos encontramos en la Concejalía de Bienestar Social con los desahucios de «segunda»: los de personas y familias que se encuentran en riesgo de exclusión social, que son usuarios de los Servicios Sociales y que tienen otra manera de hacer las cosas. Siendo ésta la correcta y única forma de acceder a un recurso municipal que solvente el problema.

Como concejal y responsable del Área, pero sobre todo como portuense y ciudadana hoy he decidido hablar. La primera vez. Tras tres años y medio de trabajo callado como cabeza visible de todo un equipo de trabajadores y trabajadoras sociales que invierten toda su energía y profesionalidad en buscar soluciones a cientos de problemas humanos que llegan a diario a una Concejalía siempre colapsada de dramas sociales y que se han ido incrementando con el encrudecimiento de la crisis.

Y lo hemos hecho así porque esa es nuestra obligación y nuestro compromiso, preservando siempre la confidencialidad y la identidad de tantas y tantas familias y personas que están viviendo dramas que sensibilizarían el alma del más frío.

Hoy por supuesto tampoco voy a desvelar ningún dato, ni ningún caso concreto. Pero sí que tras tanto silencio considero necesario denunciar ante todos los portuenses un fenómeno divisorio que nos estamos encontrando en los últimos meses y que no podemos, ni debemos alentar.

Los Servicios Sociales nunca van a dar prioridad a los desahucios de primera sobre los de segunda. Los Servicios Sociales del Ayuntamiento de El Puerto de Santa María continuarán atendiendo, como lo han hecho siempre y en todos los casos, todos los desahucios, pero bajo el soporte de los informes técnicos de los Trabajadores Sociales. Es más, lo haremos a pesar de no ser una competencia municipal, porque nunca permitiremos que un portuense se quede en la calle, desvalido y desprotegido. Pero lo haremos como se debe hacer. Siguiendo los cauces pertinentes y siendo únicamente su situación socio económica familiar el único parámetro a tener en cuenta.

Desde los Servicios Sociales hemos conseguido minorar el número de desahucios del año 2011 con respecto al pasado año. Y lo hemos logrado gracias a una política de prevención y seguimiento de todas aquellas personas o familias que tienen problemas para poder pagar el alquiler de sus viviendas.

Entiendo que los de primera no acuden a los Servicios Sociales por falta de conocimiento de los recursos, sino que utilizan las redes sociales para movilizar a la ciudadanía, a mi entender, porque consideran que la presión a la que someten a la Administración les va a favorecer y solucionar su problema; siendo, a veces, su único fin acceder a una vivienda municipal.

Es más, quiero dejar claro que al no acudir a los Servicios Sociales y al no tener un soporte técnico profesional que acredite que su situación es de riesgo de exclusión social se está haciendo causa común perjudicando a muchas otras familias que sí son merecedores del apoyo de la Administración.

De hecho, a veces no todos los desahucios que llegan a los Servicios Sociales municipales tienen su solución en un alquiler alternativo, siendo la única salida las redes de apoyo familiar, mientras que su situación económica no mejore.