El PP eleva al Parlamento el cierre de Visteon y cuestiona las ayudas recibidas

El cierre de la planta de Visteon en El Puerto sigue envuelto en polémica. El PP pedirá en el Parlamento andaluz a las administraciones públicas que han otorgado subvenciones e incentivos económicos a la multinacional estadounidense que revisen «el cumplimiento de las condiciones en su día impuestas al recibir ayudas públicas». En una iniciativa parlamentaria, el PP-A propone que la Cámara autonómica exprese su «rechazo al cierre patronal» de la factoría gaditana y su apoyo a las «justas reivindicaciones» de los trabajadores para garantizar la actividad de la planta tras el expediente de regulación de empleo extintivo presentado por la empresa para sus 396 empleados.

Además, los populares reclaman a la Junta que, «en el ámbito de sus competencias, realice todas las acciones que sean oportunas en contra del cierre de la planta y en defensa del mantenimiento de los puestos de trabajo». Por otra parte, el sindicato Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) ha denunciado que el informe final del 'Análisis de la compañía, entorno corporativo y sectorial', encargado por Visteon para la planta gaditana y presentado ante la autoridad laboral en el escrito de solicitud del ERE de toda la plantilla, es totalmente «parcial e incompleto», siendo sus conclusiones «erróneas».

Así consta en una denuncia presentada ante la Inspección de Trabajo y la Delegación Provincial de Empleo de la Junta en Cádiz por la CSIF. Entre dichos aspectos, señala que las 18 líneas de producción con las que cuenta Cádiz Electrónica son «flexibles», al poseer «gran cantidad de procesos comunes» y «pudiéndose adaptar con una mínima inversión». A esto, añade que en el negocio al que se dedican los productos se consiguen «por tres o cuatro años, siendo habitual la renovación de la gama por otros tres o cuatro, hasta que los avances tecnológicos y los aprovechamientos económicos marginales provocan un cambio del producto».

El informe final es, según CSIF, totalmente «parcial e incompleto», siendo sus conclusiones «erróneas». El sindicato asegura que esta documentación «no toma en consideración» algunos aspectos que son determinantes. Así, pone como ejemplo el caso de los módulos de luces de LED, que recientemente se han conseguido y se estaba iniciando su fabricación en la planta portuense, por lo que «normalmente se mantendrá, incluso incrementará, la producción para los próximos ocho años».

Desvío de producción

Agrega el sindicato que, además de los módulos de control del motor (PCM), Visteon también fabrica «gran variedad y cantidad de otros módulos que el Grupo Visteon Corporation sigue manteniendo en cartera», citando como ejemplo los clusters -cuadro de mandos- para Jaguar-Land Rover y cuya producción han «desviado a Hungría, Portugal y principalmente a China». Según la denuncia, el Grupo Visteon Corporation ha instalado en los últimos cinco años 25 nuevas fábricas entre India y China, a las que «se ha llevado parte de la producción que se hacía en Cádiz Electrónica, en virtud de contratos cotizados y ganados por Cádiz Electrónica y que eran rentables». El argumentario de la denuncia incide en que los negocios los consigue la corporación -el Grupo Visteon Corporation- y ésta «decide dónde fabricarlos» con lo cual «resulta evidente que es la voluntad del órgano de dirección del Grupo Visteon Corporation la que decide si una fábrica se queda sin producción».

Agrega que, al tratarse de una corporación, aunque el precio del producto final es el que se fija con el cliente, la cantidad que percibe cada fábrica que interviene en el proceso «se fija internamente a nivel de la dirección de la corporación». Finalmente, el sindicato reconoce que el mercado español ha experimentado una «importante caída» en el sector del automóvil, pero subraya que también es cierto que «la inmensa mayoría» de la producción de Cádiz Electrónica «no va dirigida al mercado interior».