Tres fases de alerta

El Gobierno ha planificado una alerta en tres fases en previsión de que la inestabilidad en los países productores de petróleo derive en una crisis que dificulte el acceso al combustible. En el nivel 1, la fase actual, se adoptarán medidas de ahorro como la limitación a 110 por hora y el abaratamiento de las tarifas del transporte público. La fase II se activaría en caso de «interrupciones temporales de suministro» y contempla medidas de restricción de la demanda que están aún por determinar. La fase III sólo se activaría si tuviesen lugar «graves problemas de suministro». Se trata de un escenario muy alejado de la situación actual que obligaría a activar reservas estratégicas y a establecer un «racionamiento de la demanda». El plan está basado en las recomendaciones que realiza la Agencia Internacional de la Energía a todos los países.