Editorial

Matanza en Moscú

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Un nuevo zarpazo terrorista causó ayer la muerte de más de 30 personas y heridas a un centenar en el aeropuerto moscovita de Domodedovo en lo que el presidente Obama, muy conmovido y solidario con el Gobierno y el pueblo rusos, describió como «atroz atentado». El recuerdo de la matanza en el metro moscovita en marzo del año pasado (40 muertos) volvió al recuerdo de todos y el ataque de ayer, si como se da por muy probable es obra de separatistas caucásicos, confirma trágicamente la presencia de una guerrilla armada que, lejos de su campo de acción en Chechenia o sus aledaños, no vacila en causar la muerte a inocentes. La Federación Rusa tiene un grave problema en algunas regiones del Cáucaso Sur y no siempre ha sido un modelo de moderación e inteligencia política su modo de abordarlo. Pero no toca hoy analizarlo, sino recordar que es imposible atender reivindicación alguna cuando quien la defiende mata indiscriminada y cobardemente a civiles desarmados e inocentes. Hoy, como ha dicho el secretario general de la OTAN, todos estamos con los rusos en el dolor y en el combate contra el terror.