CÁDIZ

Recogen casi 500 firmas contra la peatonalización de San Agustín

Vecinos y comerciantes de las calles que se abrirán al tráfico consideran «desastrosa» la propuesta municipal

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La peatonalización del entorno de San Agustín se ha convertido en estos últimos días en el comentario generalizado en los bares y negocios de las calles afectadas. Las voces críticas no han tardado en aparecer y analizar una propuesta que no convence en absoluto a los vecinos y comerciantes de la zona. En apenas cuatro días, los afectados han recabado alrededor de 500 apoyos en forma de firma, que esta misma mañana se entregarán en las oficinas del Ayuntamiento para dejar constancia de este malestar.

Entre los más afectados están los vecinos y comercios de la calle Manzanares, en el tramo que discurre hacia la calle Cristóbal Colón, que dejará de ser peatonal para convertir en la principal vía de salida del tráfico hacia Canalejas. «No entendemos que vuelvan a permitir el tráfico por esta zona cuando lo quitaron hace veinte años porque era un auténtico desastre. Los peatones tendrán que resguardarse en los portales de las casas para que los coches y camiones puedan pasar por aquí», apuntó José Flores, de la Fontanería Flores.

El propietario de la Cafetería Las Nieves también se ha tomado con gran preocupación lo que hasta hoy en día es una propuesta del Ayuntamiento. «La estrechez de la calle va a provocar que los vehículos tengan que maniobrar para tomar la calle Nieves, justo donde yo tengo instalada la terraza del bar. Además, es un peligro por lo pequeña que es la acera y que pone en riesgo a las personas que salen de mi negocio», agregó Carlos Hidalgo.

Juan Luis Láinez, de la Ferretería Láínez, también mantiene el mismo planteamiento que sus vecinos. «El giro del Cañón no es peligroso, porque hay espacio suficiente. El que sí es peligroso es el que van a poner ahora desde Santo Cristo a Manzanares. Yo, por ejemplo, me choqué contra el cañón que está en la esquina al hacer este giro cuando cerraron la calle Sánchez Barcaiztegui por obras», denunció Juan Luis Láinez.

Algunos vecinos y los representantes de la Asociación de Vecinos Cádiz Centro incluso han medido las calles para comprobar la peligrosidad de los dos itinerarios. «La calle en la que se hace el giro hoy en día mide 3,50, mientras que la que quieren poner sólo mide 3 metros. Así que el razonamiento que nos dan desde el Ayuntamiento no tiene ningún sentido», apuntó Fernando, uno de los vecinos afectados que ha tenido la iniciativa de recoger firmas en contra de la propuesta.

Cádiz Centro también se ha sumado a esta plataforma al considerar innecesario y perjudicial el cambio. Paco Gómez, portavoz de la entidad, criticó el procedimiento iniciado ahora por la alcaldesa. «No entendemos por qué no se incluyen estos aspectos en el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) que se acaba de aprobar, porque habríamos presentado nuestra correspondiente alegación. Entonces para qué sirven estos documentos», subrayó.

Asimismo, adelantó que esta nueva reorganización de la circulación también va a provocar la eliminación de dos plazas para personas minusválidas que se ubican en la actualidad en la calle Santo Cristo.

El cambio propuesto por el Consistorio consiste en permitir el acceso desde la avenida Ramón de Carranza hacia el interior por la calle Sánchez Barcaiztegui (que antes era la vía de salida) hacia la Plaza de Mendizábal, calle Las Nieves, Feduchy, Palillero, Montañés, Candelaria, Santo Cristo, Manzanares y Cristóbal Colón, que se convertiría a partir de entonces en la única zona de salida para incorporarse de nuevo a la avenida Ramón de Carranza.

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