Imagen recreada de cómo quedará el establecimiento de Marisquería Baro dentro del paseo marítimo Puntales-La Paz. :: LA VOZ
CÁDIZ

La obra del primer quiosco-restaurante del paseo marítimo de La Paz ya está en marcha

Marisquería Baro invertirá casi medio millón de euros en esta instalación, que pretende inaugurar en octubre

CÁDIZ. Actualizado: Guardar
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Manuel Baro está acostumbrado a empezar de cero. Hace más de 30 años apostó por el paseo Marítimo como zona de recreo y el tiempo -y las aglomeraciones de gente durante el verano en esa zona- le han dado la razón. Está convencido de que le pasará lo mismo en la barriada de La Paz, donde ya ha comenzado la obra para instalar un quiosco-restaurante, que será una nueva sede de su conocida marisquería.

Se muestra ilusionado con el proyecto, porque está seguro de que esa es la zona en expansión de la ciudad. «Ya es un paseo más agradable y más bonito que el otro; lo que pasa es que aquel tiene la playa, pero este es más amplio y más relajante», explica.

Las obras han comenzado ya con los trabajos previos para las acometidas de luz, agua, saneamiento, gas y telefonía y en agosto se prevé empezar a levantar la estructura. La idea es que en octubre pueda inaugurarse, si sale todo según lo previsto.

Será completamente acristalado, «para no romper la vista de la Bahía», salvo en la zona de la cocina. Tendrá categoría de cafetería, restaurante y heladería, con su correspondiente terraza.

La inversión es alta, de casi medio millón de euros, aunque el presupuesto no está cerrado. «A la crisis hay que echarle coraje», resume el empresario, que está convencido de que al resto de los escasos negocios del entorno también les vendrá bien este nuevo local. En la zona de soportales frente al paseo hay un par de bares, más los que tienen los dos clubs náuticos, el Viento de Levante y el Alcázar, que están abiertos al público en general. «Me consta que alguno de ellos piensa igual que yo, que esto nos beneficia a todos».

La nueva marisquería trabajará el mismo género que el local del paseo Marítimo-Ingeniero La Cierva, con precios parecidos. «No nos hacemos la competencia a nosotros mismos, porque el que vive en la Barriada no quiere desplazarse tan lejos y con este restaurante va a tener un lugar cercano, para tomar marisco o pescado o llevárselo a su casa», resume.

El negocio dará trabajo a seis o siete personas más. «Es una inversión fuerte», asegura el empresario. Al margen del presupuesto empleado en la construcción, el empresario tendrá que pagar un canon, que irá desde los 5.000 euros los tres primeros años a los 10.000 a partir del cuarto y se quedará al final (a partir del séptimo), en 15.000 euros. La concesión se hará por 12 años, prorrogable por otros dos, hasta un máximo de 20.