Magro se muestra desencantado con la actitud del Consistorio. :: L.V.
Ángel Magro - Presidente de la asociación de vecinos de Chapín -

«El Ayuntamiento no escucha a los vecinos; sólo nos queda la vía penal»

Considera que el gobierno municipal no hace nada para impedir que sea una zona saturada de ruidos por la movida nocturna

JEREZ. Actualizado: Guardar
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Los vecinos de Chapín se muestran muy enfadados con el Ayuntamiento de Jerez, porque aseguran que hace caso omiso a las numerosas quejas mostradas por el ruido que provoca en la barriada la movida juvenil. Su presidente, Ángel Magro, critica la actitud de los gobernantes municipales porque «con ellos es prácticamente imposible dialogar» y les pide que la consideren zona saturada de ruido.

-¿Cómo llevan los vecinos de Chapín el problema de ruido por la movida nocturna?

-La situación sigue igual. Seguimos sufriendo el mismo problema. Hay dos zonas claves que son la situada detrás de los arcos en la avenida Lola Flores y la del botellódromo. Actualmente la mayoría de las quejas se refieren a la zona trasera del supermercado porque el Ayuntamiento no cumple la normativa europea de ruido y a pesar de las alegaciones que hemos puesto para que no se den más licencias a locales en esta zona, el Consistorio ha dado un nuevo permiso a un bar musical que está apenas a unos seis metros de las viviendas de los vecinos. Además también le ha permitido instalar una terraza con mesas.

-¿Qué medidas están tomando?

-Los vecinos están poniendo denuncias y de hecho estamos trabajando desde la asociación con ellos para denunciar al Ayuntamiento por haber dado una apertura al mencionado local. De todas formas lo que nosotros vemos es que hablar con el Ayuntamiento es prácticamente imposible. Pedimos cita para Medio Ambiente y aún estamos a la espera, lo mismo ocurre con Urbanismo. Queremos hacer las cosas bien y hablar con ellos, pero pensamos que con ellos no vale para nada el diálogo porque las dos partes tienen que escucharse. A ellos los vecinos les importan poco, les da absolutamente igual que sufran ruidos y molestias. Tenemos denuncias en la Policía Local y no han servido para nada. Se han tramitado a las diferentes delegaciones del Ayuntamiento y le hemos pedido que se hagan las mediciones en la zona, tal y como marca la normativa europea para que se considere zona saturada de ruidos.

-¿Qué opciones les quedan?

-La única que nos queda es la vía penal, que los vecinos denuncien porque están sufriendo muchísimo porque han tenido que vender su automóvil, porque se lo rayan. Hay otros que están de los nervios porque todos los fines de semana, y ahora en verano más, el ruido es tremendo. Muchos tienen que irse a altas horas de la madrugada a denunciar en la Policía, que ya los conocen pero ellos sólo pueden levantar acta. En definitiva, estamos en una situación crítica porque con este Ayuntamiento no podemos trabajar y en el tema de los ruidos sólo nos quedan las denuncias por la vía judicial.

-¿Qué otros asuntos tienen pendiente en el colectivo de Chapín?

-Estamos trabajando con los vecinos de la plaza del Caballo en el asunto del catastro. En este caso hemos trabajado mucho para que se vea la hipocresía que tiene este Ayuntamiento, que nos ha hecho la vida imposible con este tema, diciéndonos constantemente que mentíamos y gracias a Díos el TSJA nos está dando la razón. Por eso pensamos que al final lo que nos queda a los vecinos con este gobierno municipal, que es incapaz de velar por el interés de la gente, es la justicia. Es una pena porque hay gente competente, pero a ellos no les dejan hablar. También estamos muy poco satisfechos de la división que hicieron con Participación Ciudadana. Nos parece un fracaso total. Nos hemos quejado constantemente con plaza del Caballo, la asociación de vecinos La Marquesa, Jerez norte y digan lo que digan ellos no nos van a desunir. Formamos una piña y vamos a luchar contra todas las injusticias de este Ayuntamiento de Jerez.

-¿Cómo valora su paso por la presidencia del colectivo?

-Es muy duro. He puesto mi cargo a disposición de los vecinos varias veces y nadie ha querido tomar la alternativa porque trabajar con este Ayuntamiento del que es imposible conseguir nada es frustrante y dan ganas de tirar la toalla.