Panrico ofrece un 40% menos de despidos sólo si sale todo el comité de empresa

La dirección de Panrico lanzó este jueves un órdago al comité de empresa de su fábrica en Santa Perpètua de Mogoda (Barcelona), la única que todavía continua en huelga siete meses después de iniciarse el conflicto. Reducirá un 40% los 133 despidos previstos en la planta a cambio de la salida forzosa de todos sus miembros; de lo contrario, acudirá a los tribunales para denunciar el paro por “abusivo”, al tiempo que pedirá medidas cautelares para paralizar temporalmente las protestas.

La propuesta, tachada de «chantaje» y «ataque directo» por parte de los representantes de la plantilla, será analizada este sábado en una asamblea con todos los trabajadores. Antes, ya este mismo viernes, realizarán una nueva manifestación por las calles de Barcelona. Y es que la oferta del fabricantes de los populares Donuts y Bollycao, esconde otras condiciones polémicas como, por ejemplo, que se vetan las posibles salidas voluntarias en el expediente de regulación de empleo (ERE) ya abierto.

La empresa también “quiere participar en la designación de la plantilla restante más idónea”, según reza en un comunicado. Con ello, pretende “obtener los criterios de eficacia y eficiencia que persigue el plan industrial y estratégico ya aprobado en 2013”.

Fuentes del comité consideraron muy probable que bajo estas condiciones perdure el conflicto, pese a que su intención inicial era buscar una solución tras la reciente sentencia de la Audiencia Nacional. Los jueces han validado los despidos ya acometidos en todo el grupo, aunque prohíben los futuros –156 (para un total que pretendía ser de 745) previstos en sus cinco fábricas en 2015 y 2016– porque no ven «razonables» las supuestas pérdidas que de forma anticipada estimaban desde Panrico, que soporta una deuda superior a los 100 millones de euros.

La Generalitat pide "responsabilidad"

Desde la Generalitat catalana apelaron también este jueves –a través de su consejero de Empresa y Empleo, Felip Puig- a la «responsabilidad» de ambas partes para firmar un acuerdo lo antes posible, si bien mostraron un apoyo mayor hacia la empresa por lo que consideran “un gesto de buena voluntad”, al ofrecer un recorte “significativo” en las salidas forzosas de su ERE. Asimismo, insistieron en que la solución al conflicto “no llegará de la mano de los tribunales”.