Un legado enorme

Iker Casillas:«Era un show»

«Luis es bueno porque nos hablaba de forma campechana, franca, sincera y honesta. Mi relación con él fue buenísima. Era una persona entrañable que nos ha influido bastante a nivel internacional y muy querida por todos los jugadores que ha tenido a sus órdenes. Sin duda que creó un modelo y fue quien cambió la historia del fútbol español. Su legado es enorme, algo que siempre le tendrá que agradecer todo el fútbol español. Todo lo que hizo fue por el bien de nuestro fútbol. Nos enseñó muchísimo y ese título en la Eurocopa de 2008 marcó los acontecimientos que vendrían después. Anécdotas con él hay muchas. Siempre que tenías la oportunidad de estar con él podías guardar algún recuerdo y te reías. Sobre todo, no olvido mi primer partido con él en la selección. Yo sólo tenía 23 años y había estado jugando con Iñaki Sáez, pero Luis puso a Cañizares en Las Palmas ante Venezuela, en agosto de 2004. En un entrenamiento me cogió, me preguntó lo que me pasaba y le dije que estaba un poco triste y que no entendía los cambios que había hecho pero que debía ser compañero. Entonces me respondió que no le mirase como hacen las vacas al paso del tren. Esa frase se me quedó clavada de por vida. Siempre ha sido muy directo y claro y siempre haciendo reír. En las charlas era un show. Escucharle era un descojone. Hacía que te olvidases del partido, te liberases de la presión y te centrases en lo que decía».

Del Bosque: «Le tenía un aprecio especial»

«Es un día triste para la familia del fútbol español porque ha fallecido un hombre bueno y muy importante en la historia del fútbol español. Sabía que tenía algún problema de salud pero nunca me podía imaginar que el desenlace sería así. Hemos perdido a un hombre clave en la historia moderna de este deporte. Siempre hemos reconocido su labor, una tarea esencial para el crecimiento de la selección española. Hasta el más profano se da cuenta de lo que Luis Aragonés ha hecho para mejorar la eficacia de nuestro fútbol. Recibimos una extraordinaria herencia en todos los aspectos, un equipo trabajado técnica, táctica y humanamente. Nosotros intentamos mantener y potenciar todas esas virtudes, a pesar de influencias externas peligrosas. Tenía una larga experiencia como técnico y, personalmente, le tenía un aprecio especial. También fue un jugador fantástico, de los mejores que ha habido en este país sin duda. No éramos de la misma generación pero lo sufrí como rival. Fue un gran centrocampista a pesar de que parecía que no corría en exceso. Era lento, como yo, pero tenía una calidad y una visión de juego extraordinarias. Y sus golpeos a balón parado eran soberbios».