«El fútbol español se sanea y aparecen muchos inversores extranjeros serios»

Miguel Cardenal (Bilbao, 15 de marzo de 1968) cumplirá en enero dos años en el cargo de secretario de Estado para el Deporte. En este período ha llevado a cabo una serie de medidas encaminadas a poner freno al despilfarro del fútbol, luchar con dureza contra el dopaje y potenciar las disciplinas menos mediáticas.

PREGUNTA: ¿Cuál es su balance del año?

RESPUESTA: Ha sido complicadísimo, pero de muchísimas satisfacciones. Ha habido despidos, reducciones de personal, pero se ha descubierto la capacidad de generar recursos. También se ha aumentado la dotación presupuestaria y están en marcha varios proyectos para lograr que los deportes minoritarios tengan mayor notoriedad y que fluya el interés de las empresas.

P.: ¿Se conseguirá justo ahora que la crisis hace tanto daño?

R.: El deporte en nuestro país genera muchísima actividad económica. De cada seis turistas que visitan España uno señala que lo hace para asistir a un acontecimiento deportivo o para practicar deporte. Casi ocho millones de turistas dicen que es para practicar deporte.

P.: ¿Qué hecho positivo destacaría?

R.: El extraordinario poderío del deporte femenino. Es un referente a nivel mundial lo que está sucediendo con el deporte femenino en nuestro país.

P.: ¿Y cuál borraría?

R.: El más triste, la muerte de María de Villota, y la decepción de los Juegos de 2020. Hubiera sido una magnífica noticia para el deporte y para el país.

P.: ¿El factor fundamental del fiasco fue la economía del país?

R.: No me cabe duda de que la debilidad era la situación económica. Se obtuvieron sólo 26 votos, pero hay un deseo de la gente de venir aquí y muchas empresas extranjeras están viniendo a España a invertir, porque lo ven como un valor seguro.

P.: ¿Y el dopaje? ¿Por qué España sigue estando bajo sospecha?

R.: Lo que leo de fuera no es eso, sino declaraciones elogiosas de organismos internacionales. Sí pude tener esa sensación en el pasado.

P.: Sin embargo, la 'operación Puerto' se saldó con sanciones leves y se ordenó destruir las bolsas de sangre.

R.: La 'operación Puerto' no es la política antidopaje actual en España. El Gobierno ha recurrido, pidiendo condenas más severas y que las bolsas se pongan a disposición de la autoridad antidopaje, y es lo que la gente tiene que valorar.

P.: Ahora seguimos con el 'caso Marta Domínguez' y positivos en distintas disciplinas.

R.: Si hay alguien que hace trampas en España se le castiga. Quien recurre al uso de sustancias prohibidas se le sanciona y se le aplica la ley con todo el rigor.

P.: ¿Cómo está el expediente abierto a Marta por presuntas irregularidades en su pasaporte biológico?

R.: Como el de cualquier otro deportista, tramitándose con absoluta normalidad. Tiene los mismos derechos y deberes que cualquier deportista. Ante las autoridades antidopaje no es ni más ni menos que una deportista, y así se le está tratando, no como a una senadora.

P.: ¿No es una patata caliente para el CSD?

R.: No creo que se pueda hablar de patatas calientes. Hay muchas decisiones incómodas, y cualquiera que suponga expedientar a un deportista español no es agradable, pero lo primero es la obediencia y el respeto a la ley.

P.: ¿Cómo está la situación financiera del fútbol?

R.: Cuando yo llegué la deuda de los clubes profesionales era superior a 4.000 millones y con Hacienda superior a 750 millones, y no se podía sostener. Este año, por primera vez, supongo que en la historia, han bajado los sueldos de los equipos, un 14%. Otros años ya se estaba hablando a estas alturas de clubes que no pagaban y los equipos se encerraban en el vestuario.

P.: Al menos el CSD ha impuesto un régimen controlador.

R.: La deuda con Hacienda está disminuyendo y ahora no hay clubes que fichen por encima de sus posibilidades. Están cumpliendo el control económico. Se está produciendo un saneamiento sin que tenga que haber una aportación pública de dinero. Es un fenómeno que no había ocurrido hasta ahora nunca. Están viniendo muchos inversores extranjeros, serios y solventes, que quieren comprar equipos españoles. Antes aparecían presuntos salvadores. El fútbol español ha cambiado. Ahora es serio, riguroso y, por tanto, es un negocio en el que compensa invertir. Antes no quería venir nadie a comprar un equipo, y si venía era una cosa folclórica que acababa como el rosario de la aurora.

Derechos de televisión

P.: ¿Qué opina del actual reparto de los derechos de televisión?

R.: Si unos reciben más otros tienen que recibir menos. El crecimiento futuro del valor del fútbol español está sustancialmente fuera de nuestras fronteras. Nos interesa ofrecer un producto conjunto, y nuestra fortaleza para esa venta es tener aquí a los mejores jugadores del mundo. Si nuestra Liga interesa fuera un factor importantísimo es que aquí jueguen Neymar, Messi, Bale, Cristiano, Sergio Ramos, Xabi Alonso, Iniesta, Xavi... Si hacemos un reparto de televisión que lleva a que esos jugadores se vayan de nuestro país igual dañamos ese producto. Todos los clubes son conscientes de que es más el 5% de 1.000 que el 10% de 300. Y no se eliminará el partido en abierto.

P.: ¿Y la fuga de talentos en muchos deportes?

R.: La crisis económica puede influir, pero no es el factor principal en un mundo más globalizado. Es que los deportistas españoles son muy buenos. ¿Hay crisis porque se han ido Negredo y Soldado? Pues Bale, que era el icono de la Premier League, está jugando en la Liga española.