tenis

Stepanek y Berdych, maestros de la Davis

Los checos se impusieron a Granollers y López, que se diluyeron con el paso de los sets, y pusieron la eliminatoria 2-1 a favor de la República Checa

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Las sonrisas predominan en los españoles. Disfrutan y se lo pasan bien. Y eso se nota en la pista. Marchan dominando el marcador y ofreciendo un recital de juego de dobles, especialmente Marcel Granollers. Pero de repente, al final del segundo set: ‘click’. Aprietan el botón de desconexión. Tres voleas falladas por Granollers dan el segundo set y la iniciativa a los checos.

Un juego, algo insignificante en el global de una eliminatoria y vital en un partido tan igualado. Ya no hay risas ni golpes mágicos. Ahora predominan los saltitos de los checos, los puños en alto de la pareja rival y las ovaciones de la grada local. De la exhibición a las dudas, de ser una roca a diluirse en el tenis de los checos. Así pierden Marcel Granollers y Marc López ante Tomas Berdych y Radek Stepanek –lo de Rosol y Minar era un chiste checo-, por 3-6, 7-5, 7-5 y 6-3. De esta forma, este domingo dictará sentencia. David Ferrer y Nicolás Almagro deben ganar a Berdych y Stepanek, respectivamente, para dar la sexta ensaladera a España.

De doce partidos disputados como pareja de dobles, los checos solo habían perdido uno, curiosamente en la final de 2009 ante Feliciano López y Fernando Verdasco. Demostraron el porqué. Y eso que la exhibición de los españoles en la primera manga fue escandalosa. Granollers apretaba con su servicio y desde el fondo de la pista al mismo tiempo que empujaba al resto. Y en la red, López hacía magia. Infalible, moviéndose como un gato de lado a lado, Marc leía a la perfección los puntos y lucía su ‘mano’ cada vez que tocaba la pelota. Además, Stepanek demostró que no está siendo su semana al servicio. Una doble falta inoportuna daba la primera rotura del partido a los españoles, que seguían muy cómodos, especialmente al saque. No en vano, tres de sus cinco juegos ganados al servicio fueron en blanco.

Después de cerrar la primera manga, el nivel de los flamantes campeones de la Copa de Maestros bajó ligeramente. Era muy difícil rozar la perfección como en el acto inicial. Pero los españoles seguían enchufados. Siempre que tenía algún problema con su saque Marc López, Marcel Granollers aparecía en la volea. Es decir, la fuerza de un dobles perfectamente sincronizado y unido.

Granollers, de más a menos

El partido seguía moviéndose al ritmo de Granollers. La superioridad del español en todos los lados de la pista contrastaba con la igualdad en el resultado. Sin embargo, en el tramo final del set, después de que los españoles dispusiesen de una bola de rotura, Marcel desmostró que es humano. «No ha sido un partido malo, pero no hemos aprovechado la oportunidad que hemos tenido», explicó López a TVE. La fortaleza que habían demostrado se agrietó por culpa de tres voleas erradas de Granollers que le costó el set a los ‘M&M´s’. Y posteriormente el partido.

La calidad del encuentro disminuyó considerablemente en el tercer set. Poco a poco los errores no forzados fueron eclipsando a los puntos virtuosos. La dictadura de los servicios se impuso. Ninguna de las dos parejas tuvo un solo punto de ‘break’ hasta el duodécimo juego del set. Como en el segundo acto, el saque de Marc hizo aguas y los checos se colocaron dos sets a uno.

El partido se había transformado. La soltura, la lucha y la agilidad de los españoles se nubló y dio paso a un juego más frío y más a ráfagas, mucho más propicio para la victoria checa. Granollers y López se habían dejado llevar por el juego de sus rivales, un tenis basado en intercambios cortos y con menos ritmo. Un método que había surtido efecto y había desconectado a los españoles. Los juegos al saque de los locales eran un visto y no visto -encarrilaron cuatro en blanco consecutivos-, los españoles fallaron con su servicio y los checos pusieron el 2-1 en la final..

Este domingo será la jornada decisiva. A partir de las doce del mediodía, Berdych, que lleva más de siete horas en pista en dos días, se verá las caras con Ferrer. Después, si el alicantino es capaz de prolongar su buena racha en este tramo final de temporada y consigue el triunfo, Almagro saltará a la pista para medirse a Stepanek. El objetivo del murciano es claro: resarcirse de la dura derrota del viernes.