tras 15 días

El preso Uribetxebarria abandona la huelga de hambre

El etarra, condenado por el secuestro de Ortega Lara, "ha decididio priorizar su vida" dada su situación "de extrema debilidad"

BILBAO Actualizado: Guardar
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El preso de ETA Josu Uribetxebarria Bolinaga, en huelga de hambre desde hace 15 días para solicitar su puesta en libertad por su grave estado de salud, ha decidido abandonar su ayuno “dada su situación de extrema debilidad”, según ha comunicado el colectivo de apoyo a los presos de ETA Herrira.

El portavoz de Herrira, Jon Garai, ha declarado a las puertas del Hospital Donostia donde se encuentra Uribetxebarria que éste "ha decidido priorizar su vida" y dejar la huelga de hambre, ya que padece un cáncer de riñón con metástasis. El recluso, condenado por el secuestro de José Antonio Ortega Lara y el empresario Julio Iglesias Zamora, "ha tomado una decisión personal, aunque los médicos le dijeron desde un principio que en su estado no era conveniente iniciar una huelga de hambre", ha asegurado Garai.

Además, fuentes cercanas al centro hospitalario han desvelado que el secuestrador de Ortega Lara se levantó esta mañana y al salir del baño se cayó al suelo y fue atendido por su hermano, que le acompañaba en ese momento. A continuación, los médicos acudieron a atenderle y le reiteraron que debía abandonar la huelga de hambre debido a su delicado estado de salud, tal y como llevan aconsejándole desde hace días.

Además del hermano de Uribetxebarria, fuera del Hospital Donostia, donde se han concentrado un día más miembros de Herrira, ha estado el diputado foral de Medio Ambiente de Guipúzcoa, Iñaki Errazkin, de Bildu.

Ningún "trato de favor"

Por otra parte, el secretario general de Instituciones Penitenciarias, Angel Yuste, ha asegurado hoy no se ha dado ningún "trato de favor" al preso etarra, y ha precisado que se encuentra custodiado en el hospital de San Sebastián por cuestiones médicas. En declaraciones a Onda Cero, Yuste ha explicado que el recluso está recibiendo en el hospital un tratamiento que no se le puede dar en las enfermerías de la cárcel porque éstas tienen la consideración de ambulatorio.

Precisamente, Instituciones Penitenciarias acordó el pasado viernes concederle el tercer grado, paso previo para que la Audiencia Nacional decrete su excarcelación. Una decisión, por otra parte, que podría demorarse unos días después de que la Fiscalía haya pedido revisar los informes médicos.