«Este es el Tuenti que siempre quisimos lanzar»

El acto que Tuenti ha celebrado este miércoles en Madrid tenía aires de graduación. No había ni ribetes ni diplomas pero Zaryn Dentzel, consejero delegado de la compañía, se mostraba feliz y satisfecho como el que quema una larga etapa académica con el expediente bien cubierto. El que fuera uno de los cuatro fundadores de la red social se rodeó de gran parte de su equipo para anunciar el doble salto mortal que se apresta a dar la compañía española. Catorce millones de registros y seis años después, la plataforma digital da el salto al mercado internacional. Y lo hace apostando todo al mercado móvil, con una nueva aplicación para 'smartphones' y una web que ha sido reinventada para adaptar la experiencia de los usuarios a lo que el propio Dentzel define como «comunicación total».

Hasta hoy, Tuenti estaba disponible en inglés, español, euskera, gallego, catalán y portugués. A partir de ahora, duplicará este catálogo de lenguas para ofrecer su servicio en doce idiomas. Todo por allanar el camino en aventura internacional, sobre la que Dentzel asegura que «supone un riesgo total». «A pesar de todo, vamos a competir a primer nivel», advierte de forma contundente. No señala a ningún rival concreto en la conquista de Europa, América Latina y Estados Unidos. «Los más grandes de Silicon Valley», responde vagamente al insistirle en la cuestión. Aunque no concrete ya se sabe que quien quiere competir por los primeros puestos de las redes sociales a nivel mundial tiene que vérselas con titanes como Facebook, Twitter o Google +.

Si además, se tiene en cuenta la apuesta por la movilidad a la lista de rivales se suman pesos pesados como Whatsapp y un largo etcétera de aplicaciones de mensajería instantánea. Confía «totalmente» en un proyecto «que lleva un año cocinándose en el horno» y habla sobre el mismo con la seguridad del que se cree capaz de tumbar un Boeing a pedradas. Quien espere ver en Dentzel el reflejo del típico consejero delegado se equivoca. Se declara torpe con los Powerpoint - "no es lo mío", murmura mientras aprieta con insistencia el mando para que desfilen las diapositivas- y apenas ha dado dos ruedas de prensa desde el nacimiento de la empresa.

Calza sandalias y lleva la misma camiseta que el resto de la plantilla, de los que habla con el mismo orgullo que las cifras logradas hasta el momento. Guarismos que le han servido para representar un importante rival para los intereses de Facebook en España y para conseguir resistir como la segunda red social más popular en detrimento de la moda del 'microblogging' del jilguero más famoso de la Red, a diferencia de lo que ha pasado en otros mercados.

Sin embargo, no es suficiente para él: «El mayor riesgo que podíamos correr es que, una vez conseguido el éxito, quedarnos ahí e intentar retener ese éxito. En ese aspecto, las cifras de la web de Tuenti han podido ser una debilidad para nosotros», afirma. «El salto al móvil, en estas condiciones, era imprescindible», añade sugiriendo que cualquier plataforma que no haga esta transición «tiene un futuro complicado».

Experiencia móvil

«Es el Tuenti que siempre hemos querido lanzar», repite una y otra vez. Insiste en lo sencillo de la aplicación para móvil y la nueva web, que ha sido lanzada en beta internacionalmente, pero que tardará unos meses en llegar a España y cuando lo haga, será "de forma escalanoda" para evitar causar un trauma a una parroquía que ronda los diez millones de usuarios activos. «Queremos conseguir una buena integración y una experiencia en la nube. Que puedas empezar una conversación en el ordenador, seguirla en la tableta en el sofá y terminarla desde el móvil mientras sales», agrega.

Entre los cambios más notables, está el de la privacidad. Hasta el momento, Tuenti solo permitía comunicarse con las personas que habían sido agregadas como 'Amigos'. Ahora, han incluido un nuevo tipo de perfil con el que solo se puede chatear e intercambiar archivos a través del servicio de mensajería, que cada día mueve más de 400 millones de mensajes. «Yo tengo a mi abuela en Facebook y siempre que subo una foto la acaba comentando y todavía no he conseguido evitar esto», bromea Dentzel quien espera que todos los cambios ayuden a quitar la etiqueta de que su red social está pensada para adolescentes.

«Yo quiero tener a gente profesional en mi cuenta, pero no quiero que puedan ver las fotos de las locuras del último fin de semana», agrega. Con estas novedades considera que ahora puede también rascar usuarios de otras plataformas más orientadas a las relaciones laborales, como Linkedin: «La gente adulta formará parte de Tuenti por el buen funcionamiento del producto». La aplicación para teléfonos ya está disponible para descargar en Android y Blackberry. Antes de que finalice el verano llegarán las versiones para iPhone y Windows Phone. Se trata de una interfaz sencilla e intuitiva que cuenta tan solo con tres pantallas: una con la identidad digital, otra para la mensajería instantánea y otra que han bautizado como 'Momentos', donde compartir imágenes con tus amigos de la red social.

Falta todavía ver cómo avanza el tema de la publicidad en los dispositivos móviles, una ecuación cuyo resultado parece vital. No en vano, Facebook fue duramente castigado en su estreno en Bolsa por las dudas de los inversores de la capacidad de rentabilizar este soporte. «Sabemos que este es un proceso lento y que hay que ir paso a paso», dice Dentzel. «Ahora lo que es seguir sumando nuevos usuarios y que nos den su 'feed back' sobre los nuevos cambios».