Rajoy zanja la polémica: «No soy partidario del copago»

Mariano Rajoy ha intentado zanjar la polémica sobre el copago sanitario, que en los últimos días se había convertido en el centro del debate electoral en Andalucía y en Asturias. Tres días después de que Cataluña aprobase, gracias a la abstención del PP en el Parlament, una tasa de un euro por cada receta médica que se expida en los centros de salud públicos, el presidente del Gobierno ha asegurado: "Si me pregunta a mí, personalmente yo no soy partidario del copago en la sanidad".

Rajoy, al igual que hizo el viernes Soraya Sáenz de Santamaría, ha dejado claro que este asunto "no está sobre la mesa" del Gobierno porque no se ha tratado ni en el Consejo de Ministros, ni en la Comisión de Asuntos Económicos ni en la Comisión de Secretarios y Subsecretarios de Estado.

Esta controversia se aclarará de manera definitiva el próximo lunes 26, cuando se reúna el Consejo Interterritorial de Sanidad y los consejeros de gobiernos autonómicos expongan a la ministra Ana Mato sus propuestas para garantizar la preservación del sistema público de sanidad. El presidente de Galicia, el popular Alberto Núñez Fejióo, ya manifestó su intención de secundar el debate sobre el recargo en la receta farmacéutica como una medida clave para mantener la gratuidad y universalidad de las consultas y las operaciones quirúrgicas.

Rajoy ha hecho estas declaraciones durante la rueda de prensa conjunta que ha ofrecido esta en la Moncloa con su homólogo de Ecuador, Rafael Correa. Se trata de la primera visita de un presidente de América Latina a España, desde que Rajoy es presidente del Gobierno.

También ha negado sentirse "presionado o chantajeado" sobre la intención de la Generalitat de organizar una consulta sobre el pacto fiscal. "No me siento presionado o chantajeado, porque eso es un estado anímico y me voy a centrar en lo fundamental. No voy a hacer nada que no me parezca sensato y razonable", explicó el presidente.

Un 'peculiar' Correa

Correa ha demostrado que es un dirigente muy peculiar. Ha compartido su "extrañeza" y disconformidad con la legislación española sobre las hipotecas que afecta a muchos de los 400.000 ciudadanos de Ecuador que residen en España. El mandatario sudamericano no entiende cómo un banco, "que tasó por encima de su valor una vivienda durante la burbuja inmobiliaria, puede ahora tasar esa vivienda en un precio inferior con lo que el ser humano tiene que seguir pagando aunque se quede sin casa".

Correa, además, ha puesto en duda las condiciones mentales de su hermano mayor, Fabricio Correa, que se presentará a las próximas elecciones presidenciales en su país. Él, de momento, no desvela si optará a la reelección. Lo que sí ha confirmado es que, tras la invitación de Mariano Rajoy, participará en la próxima Cumbre Iberoamericana que se celebrará el próximo noviembre en Cádiz. Eso sí, ha reclamado que se aborden asuntos de "interés real" para la región como "la lucha contra el narcotráfico o el conflicto de Las Malvinas", que enfrenta a Argentina y el Reino Unido.