tráfico

El cansancio, peligro en la operación retorno

Aumenta en un 86% el tiempo de reacción ante un obstáculo

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Miles de conductores emprenderán el viaje de retorno a casa entre este fin de semana y el próximo miércoles. Serán viajes largos, con vehículos cargados y carreteras atestadas de vehículos en los que el cansancio y la fatiga aumentan del riesgo de sufrir un accidente.

La falta de descanso, la deshidratación, el calor y el consumo de alcohol son algunas de las causas de la fatiga, destacan los responsables de Seguridad Vial del RACE. Esto provoca una disminución de la atención al volante y aumenta en un 86% del tiempo de reacción ante un obstáculo, lo que incrementa el riesgo de sufrir un accidente. Además, conducir sin descanso supone dejar de ver el 40% de las señales.

La fatiga al volante es la cuarta causa de muerte en las carreteras españolas. Sin embargo, los conductores siguen sin ser conscientes del riesgo que supone, no detectan sus síntomas a tiempo y no toman las adecuadas medidas preventivas.

Según el 'Estudio sobre Fatiga y Conducción 2011' elaborado por el RACE y la Asociación Nacional de Fabricantes de Bebidas Refrescantes Analcohólica (ANFABRA) para analizar los hábitos al circular y nivel de conocimiento y percepción del riesgo de los conductores españoles, un 75% de los entrevistados ha sufrido somnolencia al volante y un 60% pérdidas de concentración.

De esta manera, desde la asociación de conductores se recomienda que al emprender el largo viaje de regreso de vacaciones se tome la conducción de forma relajada y no se intente recuperar el tiempo perdido tras un atasco; cumplir y respetar las normas de circulación; al sentir pesadez en los ojos o parpadeo constante hay que pararse y descansar; las paradas deben durar al menos quince minutos y hay que bajar del vehículo; ajustar el asiento (banqueta y respaldo), el reposacabezas y el volante en profundidad y altura del volante, porque viajar de forma cómoda reduce los calambres y los dolores musculares y mantenerse hidratado para evitar la reducción de la atención, abotargamiento, dolor de cabeza, cansancio y fatiga.

Cómo ahorrar combustible

Para ahorrar combustible no siempre hay que ir más despacio, como pretendía el Gobierno con la reducción de la velocidad máxima a 110 Km/h. Según recoge el boletín digital Autocasión.com, la primera regla es 'adelgazar'. Vaciar el maletero de cosas que no son necesarias y, por tanto, aligerar el peso del coche, lo que puede reducir hasta en un 9% el consumo de combustible (las cadenas de nieve, un paraguas, un extintor caducado, la baca que nunca se utilizó, la parrilla de la barbacoa, las botas de montaña viejas)

- Mejorar la aerodinámica. En este apartado podría quitarse la baca si no se utiliza, no levantar el techo solar y prescindir de aditamentos aerodinámicos deportivos de dudosa homologación (alerones, pasos de ruedas…). Además se puede controlar la presión de los neumáticos para reducir el rozamiento. Y las ventanillas, siempre arriba. Con todo, el gasto se reduce entre un 6 y un 12%.

- Mimar el motor. Revisar adecuadamente el motor del coche y reponer los líquidos con productos de calidad puede reducir el consumo de combustible hasta en un 10%. El correcto mantenimiento del coche: aceite siempre limpio -y bueno- y filtros a la orden del día. Un motor a punto y pertinentemente preparado para economizar ahorraría entre un 8 y un 10% de la factura en la gasolinera.

- Optimizar la ruta. En ocasiones, un trayecto más largo pero con tráfico más fluido y con menos obstáculos resulta bastante más económico. Diferentes navegadores, online o portátiles, ya ofrecen la posibilidad de escoger la ruta hacia un destino siguiendo criterios de eficiencia energética. A ello hay que sumar el conducir sin acelerones, sin apurar marchas, a velocidad constante.