Simple Plan recupera su esencia

Se mueven con soltura entre el rock alternativo y el pop punk, apuestan por canciones de ritmo vertiginoso y adictivo y provocan el delirio entre muchas quinceañeras. Además, hay que reconocerles el mérito de llevar más de una década sobre los escenarios sin que se hayan visto devorados por la lucha de egos que ha consumido a otros grupos. Y por si esto fuera poco, se han implicado en numerosas causas sociales, contando para ello con una fundación que ha ayudado a jóvenes con problemas de adicción a las drogas o a familias sumidas en la pobreza. Los componentes de Simple Plan son, en definitiva, unos ‘chicos buenos’ en medio de una industria que suele preferir a los atormentados. Y su público se lo agradece.

El quinteto canadiense publicó su último trabajo a comienzos de 2008, conquistando el favor de los fans con singles tan pegadizos como ‘When I’m gone’, ‘Your love is a lie’ o ‘Save you’, tema este último que volvía a poner de manifiesto el compromiso de la banda con los dramas humanos -la batalla contra el cáncer que libró el hermano de uno de los integrantes del grupo, Pierre Bouvier, era su razón de ser-.

Ahora regresan con ‘Get your heart on!’, su cuarto trabajo de estudio. Un álbum en el que Simple Plan se aleja del carácter introspectivo que conmovió a muchos de sus incondicionales para recuperar el espíritu de sus dos primeros discos.

Vitalista como ‘No pads, no helmets... just balls’ (2002) y ‘Still not getting any...’ (2004), el disco se compone de un total de once canciones. Producido por Brian Howes, tuvo como adelanto ‘Can’t get my hands off you’, un tema que cuenta con la colaboración de Rivers Cuomo, el líder de Weezer. Sin embargo, el primer single es ‘Jet lag’, en el que los canadienses recurren a otra invitada de lujo, la británica Natasha Bendingfield. Un sencillo que se ha convertido en la banda sonora de la última campaña publicitaria de Pascual Bi Frutas. Algo que no vendrá nada mal para azuzar las ventas de un grupo que ya ha conseguido colocar más de siete millones de copias de sus tres primeros LPs.

La reina del dance

La semana trae también el nuevo trabajo de una de las reinas del dance europeo, Kate Ryan. La belga, que alcanzó su mayor éxito hace un par de años con ‘Ella Elle l’a’, se metió en el estudio de grabación bajo la atenta mirada del productor Anders Hansson para facturar un nuevo conjunto de canciones destinadas a reventar las pistas de baile.

El resultado es ‘Electroshock’, un disco plagado de ritmos tan vertiginosos como adictivos que alcanza su mejor resultado con ‘LoveLife’, un single lanzado a comienzos de abril y que se aupó rápidamente al primer puesto de las listas de una docena de países. A diferencia de ocasiones anteriores, Kate Ryan no versiona aquí ningún viejo éxito de otros artistas, pero lo que sí vuelve a hacer es interpretar los temas tanto en inglés como en francés. Suficiente para triunfar en verano.

Por lo que respecta al plano nacional, conviene escuchar ‘Tripolar’, un EP con cinco canciones que servirá para calmar las ansias de los seguidores del trío bilbaíno hasta que el 6 de septiembre vea la luz su nuevo álbum. ‘Lady Gaga’ es el sencillo de presentación de este trabajo. Un tema potente, fresco, fruto de una sabia combinación de dance y electrónica, con el que los vascos dan una vuelta de tuerca a su sonido. Completan el EP ‘La noche que estuvimos a punto de casarnos’, ‘Una canción de Hot Chip’, ‘Que buena estás’ y ‘Brown Sugar’. Esta última es la única que no ha sido producida por Nigel Walter, correspondiéndole la labor a Joaquín Pizarro.

Para promocionarlas, la banda ha cerrado ya numerosos conciertos que les llevarán por toda España. Madrid (20 de junio y 1 de julio), la localidad barcelonesa de Vilassar de Dalt (2 de julio), Lanzarote (16 de julio), o Calatayud (15 de agosto) serán algunas de las paradas veraniegas de su gira. A finales de septiembre emprenderán una segunda fase de la misma que les llevará a Madrid, Vigo, Zaragoza, Valencia o Sevilla, entre otras ciudades.