Youtube me mata

Cómo transformarse en Lady Gaga en sólo ocho minutos

Michelle Phan es la reina de un puñado de chicas 2.0 que han revolucionado con sus videoblogs el mundo de los consejos de belleza. Millones de mujeres dan fe de ello.

MADRID Actualizado: Guardar
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Desde que Avon comenzó a llamar a la puerta de los hogares de medio mundo para vender a las amas de casa sus cosméticos y fragancias no se había vivido una revolución similar en el consumo de los productos de belleza. Un puñado de chicas con desparpajo, habilidades 2.0 y buen gusto para realzar lo bello y disimular imperfecciones con correctores, brillos y coloretes se han convertido en los últimos años gracias a Youtube en verdaderas gurús del maquillaje y el estilo, capaces de poner de moda una sombra de marca blanca o de hundir en el ostracismo el último rímel de la multinacional más consagrada. Sin piedad y sin perder la sonrisa. Aconsejan compras, descubren el último producto milagro para las pestañas, rompen reglas del marketing y hacen saltar la banca cuando mueren por el último lápiz de labios. Son las nuevas estrellas del glam, cómplices de millones, muchos millones, de mujeres asomadas cada día a la ventana de sus videoblogs y tutoriales en la red. Adoradas por sus fans y temidas por ejecutivos adictos al Excel.

Y la reina de este universo es una menuda chica vietnamita estadounidense de 25 años, que hoy tiene su propia marca de cosméticos, IQQU, y es el fichaje estrella de Lancôme para hacer sus videos oficiales. Michelle Phan se considera a sí misma como una artista del maquillaje y certifica su fama con números: 1.373.950 seguidoras en su canal de Youtube, 647.419 fans en Facebook y en su reciente perfil de Twitter 180.344 chicas y también chicos están pendientes de sus comentarios. Sus dos videos en los que enseña a convertirse en Lady Gaga han sido vistos ¡¡¡más de 50 millones de veces!!! También enseña cómo ser una Barbie (14 millones de videos vistos) o como maquillarse para una velada de San Valentín (6,5 millones). Esta videobloguera ha descubierto el secreto y fiel a la cultura 2.0 lo ha compartido: cómo convertirse en Lady Gaga en sólo ocho minutos. Paso a paso, máscara a máscara, perfil a perfil… rímel, sombras, peluca, lentillas y efectos digitales para saltar de su imaginación manga a la realidad de carne y hueso y sólo con una pocas pinceladas por aquí y por allá.

Y para afianzar aún más este perfil generacional, el éxito de Michelle Phan se basa en este refrán tan digital: yo me lo guiso y yo me lo como. Una cámara JVC y el iMovie de su MacBook Pro le bastaron para triunfar en la red. Ella misma se grababa y editaba los videos en los que, y he aquí otra de las claves de su éxito, experimenta en su propia piel transformaciones imposibles. Su canal en Youtube, su blog y sus perfiles en las redes sociales hicieron el resto.

Y aquí, en el solar patrio de potingues y reflejos, también hay reinas y princesas del makeup. La más mediática es Isabel Llano, conocida en la red como 'isasaweis', que lo mismo recomienda una mascarilla facial que hace un arroz en el microondas. Tiene 75.000 suscriptores en Youtube y dio el salto de la red a Antena 3. Aishawari, con 43.234 seguidoras, o María Catalá, con su web Makeupzone, son otras de las estrellas mediáticas. Belén o B a la Moda es una de las últimas apariciones en esta galaxia. Pide paso con sus looks y combinaciones y la complicidad simpática de sus seguidoras, con las que comparte la noticia de su estado de buena esperanza o su último flechazo: un jersey azul de Mintmelon.

Ellas son así. Y tienen todo el poder.