Revueltas en el mundo árabe

España avala al CNT como «el representante legítimo» de Libia

La ministra ha sido recibida por algunos miembros del CNT y José Riera, el representante diplomático que España tiene destacado en la capital rebelde

BENGASI Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

La ministra española de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, ha asegurado hoy que España considera al Consejo Nacional de Transición (CNT), el órgano que aglutina a la oposición a Muamar el Gadafi, como "el legítimo representante del pueblo libio" y al que le corresponde trazar el futuro del país. Jiménez ha trasladado este mensaje al presidente del CNT, Mustafá Abdelyalil, durante su visita a Bengasi, la capital de facto de los rebeldes, en la que reiteró que "cualquier solución para Libia pasa por que Gadafi deje el poder".

En una rueda de prensa con el responsable de Exteriores de los rebeldes, Ali Esaui, Jiménez ha adelantado que España se va a implicar en la reconstrucción de Libia una vez que concluya el conflicto y continuará prestando ayuda humanitaria para atender las necesidades básicas de la población. La decisión de avalar el papel del CNT como representante legítimo del pueblo libio y canalizador de sus demandas democráticas es un paso más en el respaldo institucional a este órgano.

La visita de la ministra coincide con el anuncio de la ministra de Defensa, Carme Chacón, de que las tropas españolas permanecerán en Libia de forma indefinida y con la denuncia que la hija del coronel Gadafi ha puesto contra la OTAN por crímenes de guerra.

Al contrario que otros socios europeos, España sigue sin hablar del reconocimiento oficial del CNT como la única autoridad libia, al aplicar la doctrina de que las relaciones diplomáticas se entablan con estados, no con gobiernos. España, al igual que varios países, cuenta desde hace un mes con un 'embajador' permanente en Bengasi, José Riera, quien ha instalado su oficina en un hotel de forma provisional escoltado por dos agentes de policía.

Otras delegaciones

Reino Unido y Francia han ofrecido al CNT tener un delegado en París y Londres, frontera que España tampoco ha cruzado aún, puesto que Libia mantiene operativa su embajada en Madrid sin que su titular haya renegado de Gadafi. También permanece abierta la legación española en Trípoli, aunque sin personal diplomático, después de que el 'número dos', Diego Ruiz, regresara a Madrid tras la liberación del fotógrafo Manu Bravo a final de mayo tras su detención por la policía libia.

Con excepción de las gestiones hechas en el caso de Bravo, Jiménez dejó claro que el Gobierno español rompió todo diálogo con Gadafi desde el comienzo del conflicto a finales de febrero. "Nunca hemos vuelto a hablar con el régimen de Gadafi una vez que empezó la revolución. Desde el principio, dijimos que cualquier solución para Libia pasaba por que dejara el poder", ha subrayado en su comparecencia ante los medios en la sede del Gobierno rebelde.

Jiménez llegó a Bengasi, ciudad situada al este del país y a unos 200 kilómetros del frente de guerra, a bordo de un avión de la Fuerza Aérea Española. Un cartel con el rótulo "Our destination: freedom" ("Nuestro destino: la libertad", en inglés) y las banderas de los países que simpatizan con la insurgencia, entre ellas, la española, dieron la bienvenida a la ministra en el aeropuerto entre fuertes medidas de seguridad.

En su reunión con la ministra, las autoridades rebeldes le expusieron el calendario de la era "post Gadafi" y le expresaron el optimismo en que el dictador caiga pronto a la vista de la cascada de deserciones entre sus filas. También le pidieron poner en marcha cuanto antes el mecanismo financiero acordado por los países aliados para desviar fondos de Gadafi en el extranjero y emplearlos en la reconstrucción del país.