ADIÓS A jorge semprún

Zapatero: «Era un militante de las libertades y la cultura»

El mundo de la Cultura muestra los mayores elogios al difunto de Semprum, del que destacan el gran valor de su obra y pensamiento

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El mundo se despide de Jorge Semprún. Políticos, escritores, cineastas... destacan el pensamiento democrático y de libertad que defendió hasta sus últimos días este intelectual. Todos coinciden en señalar su desaparición como la pérdida de uno de los grandes referentes literarios, incluso políticos, del siglo XX. Las reacciones de dolor no se han hecho esperar.

José Luis Rodríguez Zapatero, presidente del Gobierno: "Jorge Semprún es un militante de las libertades, un militante de la cultura, del pensamiento, y además fue un buen ministro de Cultura del Gobierno de España. Todos debemos recordarle, homenajearle y todos hemos sentido su pérdida. Semprún está ya siempre en la historia de los mejores demócratas de Europa y de España".

Nicolas Sarkozy, presidente de Francia: "Era una figura tutelar entre los escritores comprometidos del siglo XX", que había contribuido de forma decisiva, a través de su talento multiforme como novelista, memorialista, poeta e incluso guionista de cine, a la comprensión de los resortes del totalitarismo. Francés de adopción para quien la Plaza del Panteón era el centro del universo, Semprún fue uno de los últimos grandes protagonistas de una época trágica pero radiante de la historia intelectual y literaria de nuestro país".

Ángeles González-Sinde, ministra de Cultura: "Era un gran referente tanto en lo literario como en lo político, un gran luchador por la Europa democrática. Para mí, era una enorme referencia, en lo personal y en lo profesional. En lo personal, no sólo porque sus libros, en los que habla de su experiencia en (el campo de concentración de) Buchenwald (Alemania) son libros que he leído con gran interés y emoción".

Ángel Gabilondo, ministro de Educación: : "Semprún es una referencia en todo un siglo de penalidades, en el que ha sido difícil encontrar una voz de progreso y transformación social, que ha luchado contra todo tipo de dictaduras e imposiciones de pensamientos. Siempre me conmueven personas cuya forma de vida se corresponde con sus discursos y con sus convicciones".

José María Lassalle, portavoz de Cultura del PP: "Semprún ha encarnado algo muy difícil de encontrar, que es un intelectual comprometido con la dignidad del hombre, comprometido con la libertad y la democracia, que ha hecho una aportación importantísima al reconocimiento de la cultura española como una de las cosas más grandes que puede aportar nuestro país a la historia del siglo XX"

Frédéric Mitterrand, ministro francés de Cultura: "Quedará para todos nosotros como una de las mejores figuras del pensador comprometido al servicio del ideal europeo. Se ha perdido no sólo "un gran escritor sino también un gran testigo de nuestro tiempo, de sus luchas y sus dramas. Exiliado, resistente, deportado, este hombre que puso a menudo su vida en juego, este escritor que supo asumir los riesgos de sus compromisos, también tuvo la alegría de ser reconocido por sus contemporáneos tanto en España, donde fue un ministro de Cultura apasionado por su misión, como en Francia".

Gaspar Llamazares, diputado de IU: "Tenía la mirada de un joven, no anquilosada, sino siempre crítica, y hasta la propia democracia le parecía mejorable. Es de lo mejor de nuestra historia democrática y de lo mejor de la izquierda".

Carmen Caffarel, directora del Instituto Cervantes: "Fue un referente imprescindible de la dignidad y la entereza de los grandes hombres. Pocos intelectuales han vivido de forma tan directa y desesperada la parte más cruel de la historia del siglo XX. Soportó en su propia persona los males de su país y supo transformar en literatura la memoria y el recuerdo de tanto sufrimiento".

Rosa Regás, escritora: "Gran coraje, con un gran talento literario y un gran amigo. Eraz capaz de escribir novelas y ficción basándose en la realidad. Eso es lo más difícil que hay, escribir ficción sobre la propia realidad. Tuvo el coraje de defender siempre sus ídeas y fue un hombre con unas convicciones profundas, además de ser un gran amigo con un graciosísimo sentido del humor".

Cesar Antonio Molina, ex ministro de Cultura: "Lo traté con cierta frecuencia y siempre entendí muy bien su testimonio como persona de izquierdas que había denunciado el gulag y la dictadura estalinista y la Unión Soviética, además de haber hecho lo propio con el nazismo y de haber sufrido los campos de concentración.Fue un gran novelista y un gran guionista de cine que conoció a grandes estrellas y directores y que tuvimos el honor de que dirigiera los destinos culturales de este país durante algunos años".