El anuncio de dimisión de Saleh no frena las protestas en Yemen

Miles de yemeníes han vuelto a tomar las calles de las principales ciudades del país para exigir la dimisión inmediata del presidente Alí Abdalá Saleh, quien hoy mismo ha aceptado formalmente una iniciativa de los países del golfo Pérsico para que abandone el poder en el plazo de un mes.

Según ha informado el viceministro de Información Abdo el Guindi, "el presidente ha dado su aprobación definitiva a toda la iniciativa del golfo (Pérsico) sin condiciones y en el marco de la Constitución del país". La aceptación de Saleh "responde a presiones estadounidenses y saudíes para poner fin a la crisis", ha sentenciado.

La iniciativa, dada a conocer el pasado jueves por una misión del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG), integrado por Arabia Saudí, Kuwait, Omán, Emiratos Árabes Unidos, Catar y Baréin, establece que Saleh ceda el poder al vicepresidente Abdi Rabo Mansur Hadi en el plazo de treinta días. Ayer, la formación política del jefe de Estado, el Partido del Congreso General del Pueblo, anunció que había aceptado la propuesta del CCG, pero un asistente presidencial ha insistido en que el gobernante no había dado su aprobación formal a la iniciativa.

El plan estipula, además, la formación de un Gobierno de unidad encabezado por la oposición, que prepare al país con vistas a la celebración de nuevos comicios. También fija que en el plazo de un mes Saleh ceda sus poderes al vicepresidente, y que dos meses después de esta transferencia se celebren elecciones parlamentarias y presidenciales.

Visto bueno de la oposición

La oposición se ha mostrado dispuesta a aceptar casi toda la propuesta, menos "lo referido al Gobierno de unidad nacional", señaló ayer el portavoz de la coalición opositora Partidos del Encuentro Conjunto, Mohamed Quhtan.

"Hay mucho resentimiento entre los jóvenes porque la oposición ha aceptado esta propuesta", ha señalado hoy uno de los líderes del movimiento antigubernamental en la ciudad de Hudaida, Abdulhafez Muajeb. "Incrementaremos nuestras protestas hasta que obliguemos al presidente a dimitir de inmediato", ha dicho Muajeb.

Cuatro muertos

Mientras en Saná, donde los manifestantes llevan semanas acampados, se escuchaban gritos como "Ni negociación, ni diálogo. Dimite o huye". Por otro lado, al menos cuatro personas han muerto hoy en choques durante una manifestación en la provincia de Taiz, 257 kilómetros al suroeste de Saná, ha indicado una fuente de los servicios de seguridad.

Tres de los fallecidos eran partidarios de la oposición, mientras que el cuarto era seguidor de Saleh. Los enfrentamientos se registraron en la zona de Al Chamaitin durante una protesta que pedía la renuncia del presidente. La Policía intervino para detener los choques entre fieles y detractores de Saleh y dispersó a los manifestantes con disparos al aire.