protestas en el mundo islámico

El Gobierno recalca su compromiso con las revueltas árabes

La ministra de Asuntos Exteriores estudia con los embajadores españoles en la zona la convulsa situación en el Magreb y Oriente Próximo

MADRID Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

El Gobierno ha mostrado hoy su voluntad de jugar un papel importante en los procesos de cambio que se han iniciado en el Magreb y en Oriente Medio, y ha insistido en que el anhelo de democracia de los ciudadanos de estos países puede materializarse, aunque lleve su tiempo lograrlo.

Las ministras de Asuntos Exteriores, Trinidad Jiménez, y de Defensa, Carme Chacón, mantienen hoy una reunión con diecinueve embajadores de España en estos países y otros tres en misiones especiales para analizar las revueltas en la región.

Al inicio de este encuentro, Jiménez ha subrayado que España ha estado desde el inicio de este proceso en primera línea al ser de los primeros países en apoyar las revueltas pacíficas en Túnez y Egipto, y también en reclamar la intervención en Libia para defender a la población civil de los ataques de Muamar el Gadafi.

En el caso libio, Jiménez ha subrayado que "sólo puede haber una solución política al conflicto" de ese país y ha recordado que España va a enviar a un representante diplomático a Bengasi para tratar con el Consejo Nacional de Transición Libio, al que reconoce como "interlocutor válido".

Participar en misiones humanitarias

Chacón, por su parte, ha recordado que mañana pedirá al Congreso de los Diputados no sólo la prórroga de la presencia española en la intervención internacional en Libia , sino también la ampliación de sus "cometidos" ante la eventualidad de que la ONU pueda solicitar "acciones de ayuda humanitaria".

La Unión Europea ya ha manifestado su disposición a llevar a cabo una misión militar de ayuda humanitaria al país norteafricano, pero ha dejado claro debe que para que esto ocurra debe existir una petición expresa por parte de la ONU. Mientras esto ocurre, en Bruselas ya se está trabajando para esa eventualidad, sin que por el momento se haya concretado en qué forma se ejecutaría dicha misión.

En la actualidad, España participa en la operación 'Protector Unificado' de la OTAN con cuatro aviones de combate F-18 y un avión de reabastecimiento en vuelo --para la zona de exclusión aérea-- y una fragata, un submarino y un avión de vigilancia marítima --en el embargo naval de armas--.

La ministra de Defensa ha insistido en el "firme compromiso" de España con la seguridad en el Mediterráneo, razón por la que está llamada, ha dicho, a jugar un "papel importante" en estos procesos. "El éxito va a depender de que seamos capaces de acompañar a estos países en el proceso que inician" y de "aportar experiencia", ha señalado la titular de Defensa, quien ha advertido de que el "futuro distinto" al que aspiran estos países "también presenta riesgos, no nos engañemos".

Ante los citados embajadores, los altos cargos de Defensa y Exteriores, y otros asistentes como el exjefe de la diplomacia de la UE Javier Solana, Trinidad Jiménez ha señalado que "las legítimas aspiraciones" de las sociedades de estos países persiguen un modelo que funciona "exitosamente" en otras regiones, puede funcionar en ésta.

"A costa de su propia vida", ha dicho la titular de Exteriores, los ciudadanos de estos países han demostrado que "no hay una singularidad árabe" y que "no hay por qué hacer ninguna excepción" en la defensa de sus derechos y en el apoyo a una transición democrática". "Lo que nos une es más de lo que nos separa", ha añadido Jiménez, que ha asegurado que el Gobierno quiere para los ciudadanos de estos países "lo mismo que para nosotros", un marco de libertades y derechos que permita su desarrollo y una prosperidad económica que garantice su dignidad.