El fundador de Wikileaks, Julian Assange./ Reuters
polémicas revelaciones

La Casa Blanca condena una filtración «peligrosa y temeraria» y anuncia que ha tomado medidas para el futuro

El Gobierno advierte a su fundador de que la divulgación de documentos clasificados puede tener "consecuencias graves"

WASHINGTON Actualizado: Guardar
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Primero ha intentado que Wikileaks se echara atrás y no difundiera los documentos clasificados. Tras el fracaso en su empeño ha llegado la condena. La Casa Blanca ha tachado de "peligrosa y temeraria" la filtración de esos cables diplomáticos estadounidenses. En un comunicado difundido con antelación a que varios periódicos de todo el mundo publicaran la filtración facilitada por la página, la Casa Blanca aseguraba que la divulgación pone en peligro los intereses de los EEUU en política exterior, a agentes secretos y "la causa de los derechos humanos, así como las vidas y el trabajo de los individuos" que los defienden. También aseguraba que ha tomado medidas para evitar que vuelva a suceder en el futuro.

El Gobierno de Estados Unidos advertía al fundador de Wikileaks, Julian Assange, de que la divulgación de documentos obtenidos de funcionarios sin autorización oficial puede tener "consecuencias graves". El asesor legal del Departamento de Estado, Harold Hongju Koh, enviaba una carta mientras Wikileaks se preparaba para divulgar lo que ha descrito como unos 250.000 documentos secretos relacionados con la diplomacia de EEUU. El mes pasado, Wikileaks publicó unos 400.000 documentos estadounidenses y en julio había divulgado otros 77.000 documentos relacionados con las campañas en Irak y Afganistán.

Documentos obtenidos "ilegalmente"

El Departamento de Estado indicó ayer que Assange había escrito al Gobierno de EEUU acerca de las preocupaciones por que esta revelación pública de documentos secretos pueda poner en peligro a algunas personas. En su carta de respuesta a Assange, Koh indicó que el Gobierno de Estados Unidos no se involucrará en negociaciones con Wikileaks acerca de la divulgación o distribución "de documentos secretos obtenidos ilegalmente".

Si algunos de los materiales que se divulgarán fueron entregados por funcionarios del Gobierno sin la debida autorización, añadía Koh, "se entregaron en violación de la ley de EEUU y sin consideración por las consecuencias graves de esta acción".