Los empresarios ven «útil» la reunión con Zapatero pese a las dudas iniciales

Los grandes empresarios españoles han disipado sus dudas iniciales sobre la reunión con el presidente del Gobierno al constatar que el encuentro ha sido "muy útil" y todas las partes coinciden en la urgencia de las reformas pendientes ante los ataques de los inversores a España. Según fuentes empresariales, el encuentro ha sido tan provechoso que incluso el presidente del BBVA, Francisco González, ha reconocido esta circunstancia, después de una intervención inicial muy crítica con la labor del Gobierno en cuanto a la contención presupuestaria y a la insuficiencia de las medidas adoptadas.

Con mayor o menor dureza, todos los asistentes han expuesto a José Luis Rodríguez Zapatero la necesidad de avanzar de forma rápida en las reformas y le han pedido que actúe con determinación para impulsar los cambios, como ha sido el caso del presidente del Santander, Emilio Botín. El primer banquero de España, que ha hecho un llamamiento a la necesidad de que todos rememos en "la misma dirección", ha sido uno de los que más ha dejado entrever el respaldo de los empresarios a acciones contundentes que frenen la sinrazón de los mercados, que a su juicio no tienen en cuenta los puntos fuertes del país.

Los representantes del sector financiero han sido de los primeros en intervenir en la reunión, en la que cerca de una decena de empresarios no ha podido o no ha querido expresar sus opiniones, según las fuentes consultadas. El primero en participar tras Zapatero ha sido el presidente de La Caixa y de la patronal de las cajas de ahorros, Isidre Fainé, que aseguraba que estas entidades terminarán el año sin pérdidas, al tiempo que defendía su esfuerzo para reestructurarse. En su opinión, las fusiones se han podido retrasar no por culpa de las cajas, sino por la lentitud de los parlamentos autonómicos en adaptarse a la nueva normativa, aunque se ha comprometido a que todos los procesos estén cerrados el próximo 24 de diciembre.

Sin relajo

El presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, también ha instado al Ejecutivo a proceder de forma inmediata en los capítulos pendientes y a no relajarse en los próximos meses, ya que, a su juicio, vale más actuar en exceso que por defecto para combatir el problema de credibilidad de España ante los mercados. Entre las reformas propuestas, Rato no olvidaba la necesidad de que se modifique la legislación urbanística, que no invita a seguir construyendo.

El presidente de FCC, Baldomero Falcones, y el presidente de Sacyr Vallehermoso, Luis del Rivero, han escenificado el descontento del sector constructor con la falta de medidas del Ejecutivo, que en su opinión debe ayudar con más inversión en infraestructuras o con beneficios fiscales. El presidente de Iberdrola, Ignacio Sánchez Galán, que ha sido el único en intervenir de su sector, aprovechaba la ocasión para pedir que el Gobierno resuelva el problema del déficit de tarifa y cree un marco normativo "atractivo, estable y predecible", como vienen exigiendo desde hace meses las eléctricas.

Carmen Riu, de Hoteles Riu, y el vicepresidente de Sol Meliá, Sebastián Escarrer, también han exigido mejoras para el sector turístico, en línea con lo que han hecho otros representantes sectoriales. Una de las propuestas más llamativas partía del presidente de Telecinco, Alejandro Echevarría, que abogaba por que España ponga en marcha "una política de comunicación" de cara a los principales medios económicos y financieros internacionales para mejorar la imagen del país.