El Barça se siente fuerte

Lorenzo Buenaventura, Paco Seirul.lo, Aureli Altimira y Francesc Cos no marcan goles, pero si el Barça superara el lunes al Madrid en el clásico merecerían el trato estelar que se dispensa a Messi, Villa y compañía tras los grandes partidos. Ellos son los preparadores físicos de un Barça que ha tenido que hacer la pretemporada en plena competición debido a las merecidas vacaciones post-mundialistas de media plantilla, una circunstancia agravada por un par de amistosos transoceánicos de la selección, en plena gira de conciertos por medio mundo.

Los cuatro hombres de confianza de Pep Guardiola planificaron un programa para intentar llegar en un momento de forma óptimo a las dos últimas jornadas de la primera fase de la Liga de Campeones y al choque frente al Real Madrid. Y hay que reconocerles que ajustaron bien las fechas porque el equipo azulgrana ha recuperado su mejor cara en todos los aspectos sin haber sufrido males mayores por el camino: una derrota ante el Hércules y un empate contra el Mallorca, ambos resultados en el Camp Nou, en partidos en los que el Barça no pudo jugar a su ritmo habitual antes de que se le agotaran las pilas. Pero las últimas victorias ligueras frente a Valencia y Villarreal, el 0-8 de Almería y el 0-3 ante el Panathinaikos no dejan lugar a dudas. El mejor Barça ha vuelto justo a tiempo de recibir a su eterno rival.

El Barça se siente fuerte y hasta Pep Guardiola parece más ansioso que otras veces por demostrarlo al planeta. “Tengo ganas de clásico”, confesó el miércoles en Atenas una vez asegurado el pase como primero de grupo a octavos de final en la Liga de Campeones. “Se ha hablado demasiado del partido, nosotros llegamos como llegamos, pero seguro que estamos preparados”, explicó un entrenador que nunca quiso justificar alguno de los partidos mediocres de principio de temporada con la excusa del físico.

Pedro, que lleva seis goles en los últimos ocho partidos oficiales cuando en los primero trece sólo logró uno, es el mejor ejemplo de la mejoría colectiva. Su chispa es la del grupo, la que sólo parecían tener Messi, por su condición de extraterrestre, e Iniesta, porque marcar el gol de la final del Mundial concede una energía extra. Xavi, el que más ha sufrido en este periodo, jugando con los tendones doloridos, incluso descansando algunas jornadas, ya se siente cómodo otra vez. Y como peso pesado de la plantilla avisa: “Somos los favoritos en el clásico porque jugamos en casa”. Al mismo tiempo que acaba con una de esas polémicas que sólo tienen cabida en el fútbol alrededor de la posibilidad de ganar 8-0, tal y como retó Cristiano Ronaldo: “Eso son chorradas. ¡Si el 2-6 es un resultado que sólo se da una vez en la vida! Al Madrid le tenemos muchísimo respeto como para plantearnos algo así. Sólo pensamos en ganar”. Y Dani Alves apuntó: “Sabemos que podemos ganar si jugamos a nuestro nivel”. El nivel ya es el de siempre. El lunes se sabrá si es suficiente para derrotar al nuevo Madrid de Mourinho.