Esperar al infarto sentado

La primera causa de muerte en la provincia de Cádiz son los accidentes vasculares. No es una excepción. La provincia sigue la tónica de lo que sucede en Europa y en España. «Los problemas del sistema circulatorio son la primera causa de muerte entre los países desarrollados... y entre los no desarrollados también: unos 17 millones de personas mueren cada año por los problemas que están asociados a este tipo de patologías», destaca Ismael Tinoco, coordinador del Área de Medicina Interna del Hospital Puerta del Mar. Pero hay importante resquicio para la esperanza «el 80% de estas muertes se pueden evitar llevando un estilo de vida saludable».

Es un espacio común pensar que las enfermedades cardiovasculares (que son principalmente el infarto de miocardio, el ictus y los problemas del sistema periféricos, como la trombosis), aparecen sobre todo en las zonas más ricas, «pero es al revés, de hecho, el índice de infartos en Cádiz es ligeramente más alto al del resto de España, precisamente por las bolsas de pobreza».

La razón parece obvia: cuanto peor es la situación del paciente, más descuida su dieta y menos tiempo dedica a practicar ejercicio.

Cuidarse para evitar al médico

Para evitar tener una afección de este tipo, el doctor Tinoco hace un resumen rápido: «hay tener hábitos de vida saludables». Parece fácil sobre el papel pero, ¿cuáles son? La triada capitolina es la «evitar el sobrepeso, no llevar una vida sedentaria y no fumar». El objetivo de esas medidas «es tener controlada la tensión, los niveles de azúcar y el colesterol». A tenor de las cifras, de momento la provincia tiene bastante trabajo por delante. «Cádiz sigue siendo una zona en la que se hace poco deporte, continúa habiendo un sedentarismo preocupante, pese a que cada vez vemos a más gaditanos haciendo deporte», detalla el responsable de Medicina Interna del Puerta del Mar.

Las cifras de inicio son preocupantes. De cada diez gaditanos, tres son obesos, ocho son sedentarios, cuatro tienen hipertensión y la mitad, el colesterol alto. Y, por si fuera poco, tres fuman. «Hace unos años se realizó un estudio a nivel nacional y los niños gaditanos eran de los que presentaban un mayor incide de obesidad. Esto es alarmante porque la salud hay que cuidarla desde pequeños y debería de educarse en esto en la escuela», pormenoriza este especialista, acostumbrado a ver en el Puerta del Mar a pacientes con problemas cardiacos demasiado jóvenes «porque van arrastrando una obesidad desde niños».

Gesticulando con las manos con un gesto de indignación, Tinoco llama a luchar contra el sedentarismo. «No hace falta mucho, simplemente un mínimo de 150 minutos semanales de actividad moderada o 75 minutos de actividad intensa. Y hacer ejercicio, al menos 3 o 5 veces por semana. Hay que recordar que a los pacientes que se recuperan de un problema cardiaco se le recomienda muy especialmente la práctica de ejercicio moderado». Eso sí, también previene sobre la moda de los ejercicios intensos: «Todos los que quieran hacer medias maratones, o triatlones o cosas así deberían hacerse un reconocimiento médico. Más de uno se lleva una sorpresa cuando se los hace», detalla el doctor. «En otras modalidades, como la natación o la bicicleta, solo hay que estar capacitado», remata.

Otra de las patas para prevenir sorpresas es la alimentación. «Es una pena que teniendo algo como la dieta mediterránea, Andalucía sea, tras Galicia, la región española con más problemas coronarios». Dentro de la alimentación, además de evitar las grasas, los azúcares y limitar el consumo de sal, hay que incluir un factor íntimamente ligado al del ejercicio: prevenir la obesidad. Porque ésta «provoca que el ciudadano pueda estar mal sin saberlo, de hecho, hay muchos hipertensos y muchos afectados por hipercolesterolemia que no saben que lo tienen». Es más, desvela que incluso hay pacientes que sufren diabetes (en fases iniciales) sin conocerlo.

¿Y cada cuánto hay que hacer un control para prevenir la aparición de problemas? El doctor Tinoco dice en pacientes de riesgo especial (o en hombres mayores de 40 años y mujeres mayores de 50) se debe estimar el riesgo vascular, lo que incluye la analítica, «y a partir de ese básico, en función de cada paciente». Todo por salirse de la estadística del 32% de muertes por accidente cardiovascular.