Un punto a base de oficio y actitud

En un partido marcado por el tenso ambiente extradeportivo (justo después del encuentro se confirmó la dimisión del presidente racinguista Ignacio Corzo), el Racing Portuense dio un paso más en busca de la permanencia. Y lo hizo a base de sacrificio y actitud ante el Córdoba B, un equipo valiente, ordenado y talentoso que demostró en el José del Cuvillo ser uno de los grandes favoritos al ascenso.

Salvo un remate desviado de cabeza de Capi al cuarto de hora, el equipo de Mere no puso en peligro la meta defendida por el guardameta Sillero. Al fin y al cabo, el filial blanquiverde fue ganando peso con el paso de los minutos y llevó las riendas de un partido en el que los locales, metidos de lleno en la cita desde el primer minuto, lucharon hasta el final en busca de un valioso punto.

El Córdoba B dispuso de grandes ocasiones ante un Racing que salió ileso gracias a la gran labor defensiva, liderada por el mariscal Raúl López. Ismael, que estuvo inconmensurable, evitó una clara ocasión de Javi López (26') en la primera mitad. Además, el cancerbero local se erigió en la gran figura del duelo al salvar un intento de Javi Cabezas (49'), otro de Mané a bocajarro con posterior remate de cabeza (66') y otra clara ocasión de Guerra (81'). Fueron algunos de los acercamientos de un rival que se pudo adelantar al inicio de la segunda parte. Sin embargo, el ariete Javi López no estuvo listo y, en posición de fuera de juego, remató en la línea de gol un balón que ya se colaba.

En la recta final, el visitante Raillo perdió los papeles y realizó una dura entrada por detrás sobre Rafi Cruz en el centro del campo. Su ingenua acción dejó al Córdoba B con diez, aunque los portuenses, que llegaron a jugar con tres delanteros sobre el césped, no pusieron en aprietos al arquero cordobés.

Al final, reparto de puntos y gran avance de un Racing que ya suma los mismos puntos que la pasada temporada (39), aunque con nueve partidos aún por disputar.