opinión

Wikicádiz: historia ficción

Actualizado: Guardar
Enviar noticia por correo electrónico

Cádiz fue una provincia española situada al Sur de la Comunidad Autónoma de Andalucía, creada por Real Decreto en 1833 y extinguida en diciembre de 2020 por exigencias de la Ley de Equilibrio Presupuestario. El Ministerio de Hacienda salvó Conil (junto a Leganés), y El Puerto (actual Nuevo Castro Urdiales). Los carnavales pasaron a celebrarse en Villa Robledo, del 6 al 15 de agosto.

La provincia de Cádiz contó con una antiquísima y prolífica historia que finalmente no le sirvió para nada. En torno al siglo IX a. d. C fue colonizada por los fenicios, unos señores muy serios que se pasaban media vida pescando atunes y la otra media esculpiendo sus sarcófagos. Enterraron un puñado de huesos, fundaron Doña Blanca en una tarde (aquí ponemos una explanada y allí una torre) y después se fueron. Los romanos abrieron el provechoso mercado de la salazón, aunque en el siglo IV trasladaron todas sus factorías a Polonia alegando baja productividad.

Cádiz vivió dos grandes momentos: uno en 1812, cuando fue arduamente bombardeada por los franceses, y otro en 1999, cuando Aragón presentó Los Yesterday y rompió el molde. Entre los grandes intelectuales nativos de la tierra destacan José Cadalso, Manuel de Falla y Luis Pizarro. Pizarro compaginó el ejercicio de la política con notables aportaciones al campo de la neurociencia, la hermenéutica aplicada y la psicofísica. No obstante, en los círculos académicos es especialmente recordado por su talento para la oratoria, que algunos comparan con la sobrehumana capacidad de Antonio Sanz para peinarse impecablemente la raya, aunque sople Levante. Vargas Llosa escribió al respecto: «Ambos talentos son suficientes para confirmar la existencia de un Dios creador».

La decadencia de Cádiz comenzó cuando todos los gaditanos eran chicos. El desmantelamiento industrial de la Bahía fue anterior a la propia industria. La agricultura de subsistencia necesitó subvenciones desde la invención de la azada. Los pescadores aprendían a manifestarse antes que a echar las redes. En el circo romano se encontró un criptograma con un trabajador de astilleros, con toga y corona de laurel, quemando neumáticos.

A principios del siglo XXI un estudio de la Universidad de Wichita demostró que ningún gaditano vivía en Cádiz capital, pero todos fingían hacerlo levantándose muy temprano, acostándose muy tarde y moviéndose mucho, preferiblemente en coche, para luego quejarse de la falta de aparcamiento. Una auditoría del padrón reveló que el número real de gaditanos empadronados en la Tacita era de -27. A partir de 2010, la situación se agravó. En 2012, la tasa de paro rozaba el 30%. En 2014 superó el 50% y en 2020 alcanzó el 180%. Seis de cada cuatro gaditanos ya no cobraba ninguna ayuda y se habían agotado todos los ‘chándales’ del Decathlon. El gobierno se decidió a tomar medidas.

En diciembre de 2020 Montoro anunció que Cádiz sufriría una voladura controlada por exigencias de Bruselas. Las cargas explosivas, situadas en los límites con las provincias de Málaga y Sevilla, despegaron definitivamente el territorio y la provincia flotó lentamente hasta la mitad del Atlántico. Fue entonces y solo entonces cuando Cádiz se convirtió, por fin, en una isla.