Vera-Cruz suspende su salida mientras el resto de cofradías desafían el riesgo de lluvia

Entre el barrio y el clasicismo de luto. Esas son las sensaciones que se viven hoy con la venia del cielo. Las cuatro cofradías del Lunes Santo están muy pendientes de unos partes meteorológicos cambiantes para saber si podrán completar sin sobresaltos su estación de penitencia. Aunque, por el momento todas las cofradías procesionan según lo previsto, los partes hablan de que lloverá a partir de las 23.00 horas por lo que las hermandades van a tener que correr de vuelta a sus respectivas sedes.

De la pequeña parroquia del barrio de la Viña ha salido la cofradía de La Palma bajo la admiración de muchos fieles que se han concentrado cerca del templo. Esta cofradía ya ha anunciado que recortará camino a su regreso y se recogerá entre las 23.00 y las 23.30 horas.

Mientras tanto, la Virgen de las Penas ha salido a la calle entre aplausos y fervor devocional de su barrio, portada por su cuadrilla al mando de Ramon Velazquez. Poco después el Nazareno ha asomado a una calle repleta y bajo un cielo encapotado. El nerviosismo es patente en algunos miembros de la cofradía ante la posibilidad de lluvia.

En San Francisco ya han decidido recortar camino y lo harán si pasar por delante de la residencia Alvernia, también para evitar la lluvia.

Prendimiento ha plantado su Cruz de guía en la calle a las 17.00 horas desde la iglesia del Carmen y Vera-Cruz hará lo propio a las 19.25 horas desde San Francisco.

La junta del Nazareno del Amor ha decidido salir, pero con la idea de estar recogida a las once de la noche. Por su parte, tras muchas dudas, el Prendimiento ha decidido desafiar también al riesgo de lluvia.

Y la gran decepción cofrade del día ha estado finalmente en San Francisco. Allí, los hermanos de la Vera-Cruz conocían la decisión y mostraban su dolor al no poder procesionar.