Noches de Bohemia arrojó el año pasado un déficit de 45.000 euros

Una vez aterrizado en la Delegación de Cultura, el nuevo delegado Antonio Real ha dejado patente la «descoordinación» existente en los actos festivos y la baja ocupación hotelera registrada en los últimos cinco años, que está según sus palabras al nivel de las zonas de meseta con un índice de entre el 55% y el 60%. Por ello, su equipo ha decidido poner en marcha un reestructuración que comprenderá seis ciclos festivos repartidos en todo el año. El primero de ellos estará dedicado a las fiestas de la vendimia en el mes de septiembre; en Navidad se fomentará con diversas actividades la marcha Nochebuena de Jerez y las zambombas; en Semana Santa se abrirá un ciclo de actos que arrancarán el Miércoles de Ceniza; durante el Gran Premio de Motociclismo la ciudad se «beneficiará de una semana entera» de dedicación a las motos; en la Feria se continuará la programación habitual centrada en las competiciones hípicas y en la época estival se organizarán diversos ciclos de conciertos.

Para este verano, en concreto, el concejal Antonio Montero recordó que se ha instaurado los Viernes Flamencos en el Alcázar, con la salvedad de que en esta ocasión supondrán un coste cero para las arcas municipales, frente a los 20.000 euros de déficit que arrastraron en 2009 y los 28.000 en 2010. La Fiesta de la Bulería también seguirá adelante como una de las señas de identidad inequívocas de la ciudad, una oferta complementada con conciertos como los de Pepe El Marismeño, Falete y Laura Gallego.

En cuanto a Noches de Bohemia, el delegado informó de que el pasado año supuso un déficit para las arcas municipales de 45.000 euros, algo que ha obligado a que se prescinda de este ciclo tan demandado. No obstante, dejó la puerta abierta a su vuelta el año que viene pero dentro de «un todo» que estará abanderado por las fiestas de la vendimia, que el año que viene podrán arrancar en julio.