MÁS BARATO. Londinenses y turistas hacen cola ante una oficina de venta de entradas para el teatro en Leicester Square. / AFP
Sociedad

El euro se cotiza en Londres

La caída de la libra esterlina y las grandes rebajas navideñas hacen más atractivo que nunca ir de 'shopping' a la capital británica

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La high street, o calle mayor, de las ciudades británicas está viviendo en las últimas semanas bajo la preocupación omnipresente de la crisis económica. Y aunque en un día tan festivo como el de Navidad en el calendario de Reino Unido, tiendas, centros comerciales y grandes almacenes vivieron la experiencia de las colas ante el primer día de las nuevas rebajas, la procesión va por dentro.

En primer lugar, las rebajas son espectaculares, con descuentos de hasta el 70%. Y, además, ya se sabe que algunos comercios no han resistido el primer golpe de la crisis. Woolworths, un clásico del menaje doméstico, cerrará en enero, como MFI, cadena de mobiliario. Y la cadena de música Zavvi -antes Virgin- o los especialistas en té y teteras, Whittard, esperan destino tras ponerse en manos de administradores judiciales por ley concursal.

Pero, en medio del sentimiento de depresión, hay unos clientes que miran las cosas con más optimismo. Son los portadores de euros. Porque la libra se cotizaba ayer en bolsa a 1.04 euros, cuando hace tres meses valía 1.30 y hace poco más de un año ofrecía al cambio 1.50 euros. Los portadores de moneda de la eurozona compran con el mismo dinero un 30% más de lo que compraban hace un año.

Javier Fernández, madrileño de 53 años, lo explicaba en Piccadilly Circus, el centro comercial de la capital británica: «Hay dos componentes en lo que ocurre. Por un lado, el consumo ha bajado mucho y, como consecuencia de esa caída, han tirado los precios. Y, en segundo lugar, está el cambio».

«La ciudad aún es cara»

Luz Esteban, su mujer, y Javier y Paula, sus hijos, pasan por segunda vez las fiestas navideñas en Londres y se sienten privilegiados porque una familia amiga les deja su casa. ¿Qué se puede comprar? Javier y Paula lo tienen claro: «¿Informática! Cámaras, música de MP3,... ¿Apple es más barato ahora aquí que en España!». La madre, Luz, interviene: «Pero, cuidado, porque sigue siendo un país caro. En el transporte, por ejemplo. Aquí un pase para el metro cuesta cuatro libras y, en Madrid, un euro».

Mientras la familia madrileña sigue su ruta por las atracciones y comercios de Londres, Borja Morales, de 19 años, espera una nueva avalancha de españoles en una tienda de Regent Street especializada en la venta de ropa con el cásico sello inglés de Barbour. «El puente del Pilar fue brutal. Todo españoles e italianos. Ahora es menos, pero van viniendo».

La tienda vende en un 80% a clientes extranjeros y entre ellos la mitad son españoles o italianos. «Se nota que hay crisis -dice Morales, que estudia para dirección de hoteles en Málaga y trabaja desde hace dos meses aquí para atender a los españoles mientras practica su inglés- pero sigue habiendo gente con dinero, que se gasta mil libras en cuatro chaquetas».

Este estudiante admite que los descuentos son «increíbles», pero añade que la ciudad es «carísima para el transporte, la vivienda y las frutas y hortalizas». Sus clientes le dicen estos días que Londres es ahora como Nueva York en los últimos años del dólar débil. Entonces se conocía a los turistas españoles como Give me two.