MAGIA. Los niños disfrutaron con este cuento de aventuras.
Cultura

La dieta de un ratón cosmopolita

La librería Plastilina, ubicada en la Avenida, se apunta a las sesiones de cuentacuentos con una historia de aventuras dirigida a los más pequeños

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Sabeis que es lo que come un ratón?», pregunta Ana a su joven audiencia. «¿Queso!», responden todos al unísono, a lo que uno de los más tímidos replica: «y jamón serrano». «Pues, para comprobarlo vamos a tranformarnos todos en ratón ahora mismo», añade la joven narradora, licenciada en Magisterio y estudiante de Psicopedagogia, al tiempo que invita a sus jóvenes oyentes a colocarse en fila y ponese unas graciosas orejas de roedor y pintarse los bigotes. Los padres, encantados, observan a sus retoños y no paran de hacerles fotos.

La librería Plastilina, situada en la Avenida Cayetano del Toro, se inició ayer en el campo de los cuentacuentos con una original historia, Lo que comen los ratones, protagonizada por Bruno White, un animal cosmopolita «que vive en lo alto de un rascacielos y al que, además del queso, le encantan los muebles caros». «Lo elegí porque es un cuento de aventuras, no el típico ñoño de princesas y piratas», apunta Ana Bericua. «Además, los animales tienen mucho protagonismo ahora en las historias, sólo hay que ver pelis como Ratatouille».

El cuento de Fernando Rayuela y Fernando Vicente ha sido el encargado de iniciar esta atractiva actividad para los lectores más jóvenes, que seguro tendrá continuidad. «Como esto queda lejos de la feria del libro, hemos querido organizar cuentacuentos para los niños de la zona», asegura Juan García, el dueño.

Los padres, encantados, resaltan los valores de este tipo de iniciativas: «los cuentos transmiten muy buenos valores, y reafirman los que tratamos de transmitirles los padres. Si además, le sumas los educadores de la escuela, tienes la fórmula perfecta», apostilla Ana María, una de las madres.