Costas
Garrucha, un rincón con un exquisito sabor en el levante almeriense
Esta pequeña localidad, famosa en todo el mundo por su deliciosa gamba roja, cuenta con estupendas playas de aguas cristalinas
En plena comarca del levante almeriense, a una hora aproximadamente en coche de la capital, se encuentra la encantadora localidad de Garrucha, cuyo nombre es bien conocido por los amantes de la buena mesa, debido a la exquisita gamba roja que se pesca en las aguas que bañan este municipio. Un rincón que se abraza con el mar Mediterráneo, de una indudable tradición pesquera, que es ideal para los amantes de la playa, la buena mesa y el disfrute.
La historia de esta pequeña localidad andaluza comenzó a entrar en una nueva dimensión a mediados del siglo XIX, ya que sintió de cerca la expansión económica y social que supuso la explotación de las minas de Sierra Almagrera, situada en la cercana localidad de Cuevas de Almanzora, viviéndose en toda la comarca una especie de 'edad de oro' . Garrucha se benefició de su privilegiada situación geográfica, ya que se trataba de la salida natural al mar para comerciar con los minerales y los metales que se extraían en estas minas. Los pequeños y modestos barcos de pesca, que desde siempre habían fondeado en las aguas cercanas a Garrucha, se encargaban de trasladar los materiales hasta las grandes embarcaciones que esperaban algo más alejados de la línea de la costa y que terminaban llevando la carga a diferentes lugares de Europa.
Algunos de estos vestigios de un pasado industrial todavía permanecen visibles en el casco urbano de Garrucha, como la gran chimenea que pertenecía a la Fundación San Ramón, que se conoce popularmente en la localidad como 'El Calvario'. Ha sido siempre un referente visual para los habitantes de la localidad, convirtiéndose en un mirador privilegiado.
Durante muchos años, Garrucha se convirtió en un lugar muy destacado dentro del comercio de metales, ya que desde sus aguas partían materiales de primera línea que terminaban en el mercado de países como Reino Unido o Francia. Fueron precisamente los potentados propietarios de estas minas los que de una manera casi casual, se convirtieron en los pioneros del turismo en la localidad , disfrutando los encantos de este pequeño rincón bañado por las aguas del Mar Mediterráneo.
Un manjar de los mares
A lo largo del siglo XX la industria de la pesca fue haciéndose cada vez más importante en este municipio, aunque ciertamente debido a su situación, la tradición de los pescadores se remonta a muchos años atrás. Lo más destacado y el producto que sin lugar a dudas le ha dado fama a Garrucha en toda España , es la gamba roja, que se pesca en los caladeros que se encuentran en su distrito marítimo, que comprende desde el límite con la región de Murcia hasta las inmediaciones del parque natural de Cabo de Gata.
Los pescadores de Garrucha, son unos auténticos maestros en las artes relacionadas con la pesca de arrastre de fondo, el rastreo y la pesca con artes menores. Cada día, decenas de pescadores abandonan la seguridad del hogar para pescar en los famosos caladeros de Garrucha, donde se captura la famosa gamba roja . Los amantes del marisco no pueden dejar pasar la oportunidad de degustar este producto en cualquiera de los restaurantes que existen en Garrucha, donde estas gambas -que tienen un tamaño superior al habitual-, se suelen servir preferentemente a la plancha, y que destacan por un sabor muy peculiar, siendo un producto muy valorado y demandando en numerosos mercados.
Garrucha es una ciudad volcada al mar y en su gremio de pescadores, por ello en el año 1991, en pleno paseo marítimo de la localidad, se levantó un monumento dedicado a los pescadores y a todos los hombres de la mar que a la postre fueron los fundadores de Garrucha.
En los últimos años Garrucha se ha convertido en un lugar muy atractivo, que cuenta con turismo durante todo el año, un destino con encanto al que acuden personas de todo el mundo durante todo el año, porque además cuenta con un clima muy agradable en todas las estaciones. Nuestro paseo por los diferentes hitos más destacados que nos ofrece la localidad, va a comenzar por el edificio que da cobijo en la actualidad al Ayuntamiento de Garrucha , que se construyó en el año 1875, sobre las instalaciones de un antiguo almacén de sal.
Otro de los lugares que deben de formar parte de nuestra visita es el Castillo de Jesús Nazareno, que data de finales del siglo XVIII. La función de esta fortaleza era la de erigirse como defensa de la costa de posibles ataques piratas, que en algunos momentos de la historia se convirtieron en un auténticas amenazas. En la actualidad se ha convertido en un centro de interpretación de la pesca, denominado Nautarum , y también es el escenario de eventos como bodas, presentación de libros o conciertos.
La iglesia dedicada a San Joaquín, el patrón de Garrucha, es otro de los monumentos que podemos visitar en esta localidad almeriense, y que además no nos va a dejar indiferentes, ya que cuenta con una fachada muy sencilla y realmente peculiar. Está construida en el mismo emplazamiento que ocupaba una antigua capilla que estaba situada en la parte superior del pueblo, y se levantó a finales del siglo XIX.
El malecón de Garrucha
El mar es el auténtico protagonista en Garrucha, por lo que nuestros pasos poco a poco se van a ir dirigiendo hacia el conocido como 'Paseo del Malecón', que cuenta con una extensión de un kilómetro aproximadamente. Es un auténtico placer recorrer sin prisas este lugar, admirando la excelente baranda de mármol blanco de Macael, con vistas al puerto pesquero y con el inconfundible aroma que nos ofrece el mar. Un punto en el que se ubican numerosos restaurantes y tabernas con sabor.
Para los amantes de la playa, Garrucha es un destino perfecto, ya que cuenta con tres playas urbanas , con muy buenos accesos y servicios y caracterizadas por las aguas cristalinas. El viajero podrá elegir entre las playas de Levante, Poniente y la del Pósito .
La conexión que tiene Garrucha con su mar se percibe de una manera aún más intensa visitando su espléndido puerto y su animada lonja. Fue en el año 1995 cuando se construyó el actual edificio que alberga la lonja, una de las instalaciones con mayor vida e interés con la que cuenta Garrucha. Todos los días tiene lugar en su interior la conocida subasta del pescado que se captura en las inmediaciones de Garrucha y se trata de un momento que es visitado de manera habitual por numerosos turistas . Por su parte, el puerto de Garrucha está considerado como el segundo más importante de toda la provincia de Almería, contando con una bocana de 170 metros de ancho, y más de 200 atraques.
Junto a la Lonja, en un extremo de la playa del Pósito, mirando al mar e invocando la protección de todos los pescadores, se encuentra situado el monumento dedicado a la Virgen del Carmen, que fue esculpido en el año 2006 en mármol blanco de Macael por Roberto Manzano. Un lugar que se ha convertido en un perfecto mirador hacia el mar.
Tomar una cerveza o un vino en una de las pintorescas tabernas que existen en el malecón, asistir a una de las animadas subastas que tienen lugar en su lonja, degustar una ración de exquisitas gambas rojas a la plancha o darse un baño en una excelente playa de aguas templadas; son algunos de las experiencias que el visitante no puede dejar de hacer en Garrucha, un perfecto destino para los amantes del mar y de lo auténtico .
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