Gran Canaria, la isla del queso

Gran Canaria es una «Isla de cuento»: su historia, su gente, la orografía del paisaje y su gastronomía son únicos

Cada viajero puede llegar a Gran Canaria por diferentes motivos, pero cuando descubre sus tesoros gastronómicos, queda prendido para siempre. Una de sus joyas son los quesos, piezas artesanales cuya elaboración pasa de una generación a otra, bendecida por los microclimas para alimentar de manera única a las razas autóctonas que los hacen posible.

Los quesos de Gran Canaria están cargados tanto de personalidad como de tradiciones. Prácticas ancestrales como el pastoreo y la trashumancia aportan a dichos manjares aromas y sabores únicos al paladar: quesos procedentes de pequeñas queserías que emplean leche cruda (sin tratamiento térmico) de sus propios animales: cabra majorera y oveja y vaca canaria.

El Queso Flor, una joya de cuajo vegetal con D.O.P

Al Norte de Gran Canaria, en las ganaderías predominan las ovejas, el único ganado que recorre el montañoso y verde paisaje practicando aún la ancestral trashumancia.

Y para defender este modo de vida en casi extinción y garantizar al consumidor el origen y calidad de los quesos que se elaboran de ganado de pastoreo, nació en el año 2007 la denominación de origen protegida «Queso Flor de Guía», «Queso de Media Flor de Guía» y «Queso de Guía», los únicos de la isla con esta certificación D.O.P.

El origen de estos quesos lo encontramos en las primeras poblaciones portuguesas y extremeñas que se instalaron en el s.XVI en las medianías del Noroeste, tras la Conquista. Ellos introdujeron la flor del cardo para el cuajado de la leche (concretamente los capítulos florales secos de «Cynara cardunculus var» o «Cynara scolymus»). Las características comunes a estas tres variedades tipos son que la producción de la leche, la elaboración y la maduración de los quesos se realiza en los municipios de Gáldar, Santa María de Guía y Moya; su base es la leche de oveja canaria (con un mínimo del 60 %) y mezcla con leche de vaca canaria o sus cruces (40 % máximo) y/o leche de cabra majorera (10 % máximo); y presentan un carácter estacionario marcado y arraigado al sistema tradicional de producción.

Dicen algunos expertos que han probado el Queso Flor que «tiene olor a cueva y a champiñón, cremoso y con un amargor final muy agradable».

Gran Canaria es un destino que despierta los sentidos, con una gastronomía que ofrece sabores únicos al viajero que la desee descubrir.

SABOREA GRAN CANARIA

Gran Canaria Isla de Sabores

(Stand 9, Planta Baja / Stand 40 Sala Polivalente)

Twitter: @SaboreaGC Facebook: @SaboreaGC

Instagram: @saboreagc www.grancanaria.com

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